La policía francesa mató este miércoles a un hombre que confesó haber asesinado a cinco personas de su familia, entre ellas tres menores, y que se había atrincherado en la vivienda familiar.
Agentes del Grupo de Intervención de la Gendarmería (GIGN) asaltaron a mediodía de hoy la casa, en la que el hombre, de 22 años, se había atrincherado desde la noche del martes.
Las víctimas son el padre del autor, su madrastra y los tres hijos de la pareja -sus hermanastros, de 17, 15 y 5 años de edad-, indicó el alcalde de la localidad de Douvres, citado por la prensa regional.
El joven, nacido de una relación anterior de su padre, no residía en esa vivienda, a la que llegó en la noche del martes armado con un fusil y una espada japonesa, y equipado con un chaleco antibalas, detalló la emisora pública France Info.
Tras matar a la nueva familia de su padre, él mismo llamó a la policía, que rodeó la zona. Tras una larga negociación sin resultados durante la mañana, los agentes del GIGN lanzaron a mediodía el asalto, en el que el presunto asesino fue abatido.
El suceso ocurrió en Douvres, una pequeña localidad de poco más de mil habitantes de la región Auvernia-Ródano-Alpes (este) y situada entre Lyon y la frontera suiza.
EFE