Louise Edwards, de Allerton, en Liverpool, Inglaterra, se despertó como todas las mañanas pero nunca se imaginó que ese día particularmente iba a ser distinto, y tenebroso.
Por: Clarín
Sucede que Edwards, que tiene 35 años, notó que le había salido un enorme y horrible grano, o eso pensó en ese momento, sobre el ojo derecho. Imposible de disimular con nada.
La mujer continuó con su día pero a medida que pasaban las horas, el grano crecía más y más. Pensó que podía tratarse de una picadura de algún insecto.
No le dio mayor importancia, de todas maneras, y siguió con sus tareas como lo hacía usualmente. Sin embargo, la cosa empeoró y la hinchazón fue tanta que ya le hacía fuerza sobre su ojo, y le impedía abrirlo del todo.
La mujer entonces fue al Hospital Oftalmológico de St Paul para que lo revisaran. Pero allí, los médicos descartaron que sea algo grave y la mandaron de nuevo a casa.
“Ellos (por los médicos del Hospital St Paul’s) trataron de exprimir el grano pero no pudieron. Me dieron antibióticos y me enviaron a casa”, le contó a Louise a Liverpool Echo.
“Duermo con las ventanas abiertas, así que tal vez algo entró, luego me desperté y tenía esta cosa, como un grano”, se aventuró a conjeturar.
El peor dolor que haya sentido nunca
A la mañana siguiente, Louise se despertó y descubrió que la cosa no sólo no había mejorado sino que todo parecía aún peor: su ojo derecho se había cerrado por completo debido a la hinchazón.
Y no sólo eso, ahora había aparecido el dolor, uno muy intenso. “El peor dolor que jamás haya sentido nunca, lo podía sentir en los dientes, la cabeza y los ojos”, contó la mujer.
Enseguida, la mujer decidió regresar al hospital.
Una vez más en el hospital, dos enfermeras la examinaron pero le dijeron que continuara con los medicamentos prescritos. La mujer se volvió a su hogar desanimada.
Sin embargo, camino a su casa se cruzó con una vecina que le aconsejó una solución casera. ‘”Me dijo que usara agua hirviendo directamente de la tetera”, declaró.
Nunca nada la preparó para lo que siguió
Le pareció una locura la solución que le daba la vecina, pero ya estaba desesperada, el dolor no cesaba y la inflamación tampoco. Así que finalmente se decidió a intentarlo.
Y llegó el desenlace, horripilante. La mujer con mucho cuidado intentó hacer l oque le había aconsejado la vecina y entonces de repente el grano se movió y algo comenzó a salir.
“Sentí una sensación de estallido. Le grité a mi papá que viniera a echar un vistazo y me dijo que era una especie de parásito con patas que salía del grano”, contó.
Al regresar al hospital con el ‘parásito’, les mostró a las enfermeras la sombría imagen. “Una de las enfermeras se rió y dijo que parecía sacado de una película de extraterrestres”.
“Me sentí como si estuviera en una película de extraterrestres. Me dijeron que siguiera con los antibióticos y me fuera a casa”, agregó.
Ahora tiene una cita reservada con su médico de cabecera y espera saber más sobre qué fue lo que salió de su párpado.