La Policía española detuvo por primera vez a dos supuestos combatientes del Estado Islámico (EI) de nacionalidad marroquí y vinculados con España, según informó este viernes el Ministerio del Interior.
Los sospechosos habían retornado desde Siria y habían entrado juntos en Europa hace dos meses de manera clandestina a través de la ruta de los Balcanes (Turquía, Bulgaria, Serbia, Hungría y Austria).
Uno de ellos fue detenido en la localidad barcelonesa de Mataró (noreste), donde se refugió tras llegar a España, y cumple ya prisión provisional por orden de un juez de la Audiencia Nacional.
El otro fue arrestado en Austria en virtud de una orden de detención europea emitida por España por presunta pertenencia a organización terrorista.
Es la primera vez que la Policía española captura a dos presuntos combatientes de esa organización terrorista con vinculaciones en España: uno de ellos había residido en el país antes de desplazarse a zona de conflicto, en 2014, y el otro, que partió un año después desde Marruecos, tenía a gran parte de su familia viviendo en España desde hace siete años.
Una vez en Siria, los investigados se insertaron, supuestamente, en grupos afines de Al Qaeda y recibieron entrenamiento militar. Tras la pérdida de territorios en la zona sirio-iraquí por los grupos terroristas, consiguieron desplazarse a Turquía, donde vivieron los últimos meses a la espera de poder cruzar clandestinamente a Europa, según un comunicado de Interior.
Esta operación forma parte del trabajo de Comisaría General de Información y del Centro Nacional de Inteligencia, en colaboración con otros servicios internacionales, para la “localización y neutralización del grave riesgo que supone” la entrada de combatientes retornados a Europa.
En 2018, la Policía detuvo en Barcelona (noreste español) a un presunto combatiente sin ningún vínculo previo con España que también había entrado en Europa por los Balcanes y en 2020 fue arrestado en Almería (sureste) un presunto yihadista británico, entre otras acciones policiales.
La Policía subraya la estrecha colaboración del FBI, DGST marroquí, DSN austriaca, autoridades policiales alemanas y EUROPOL, además de la asistencia de las oficinas centrales nacionales españolas de INTERPOL y SIRENE.
EFE