La zona cafetera de Barinas está padeciendo nuevamente por el mal estado de la carretera. El tramo entre Altamira y Calderas, municipio Bolívar, “no aguanta dos aguaceros más”, según Janner Bastidas, concejal y nativo de esta comunidad, que emitió una alerta para las autoridades.
Corresponsalía lapatilla.com
Estas poblaciones asentadas en el piedemonte andino, con bellezas naturales únicas, es húmeda en invierno y en verano, debido a la cantidad de cascadas y quebradas que bajan de las montañas que están a un lado de la carretera. Del otro lado, hay una gran vegetación que cubre el vacío de terreno firme, convertido en un precipicio.
Las grietas que existen en la vía representan un peligro, por muy leves que se vean algunas. Existen partes donde se ha ido al fondo la capa asfáltica y es un riesgo el paso de vehículos. A pesar de esto, persiste el tránsito de quienes se rehúsan a quedar incomunicados.
Janner Bastidas, al igual que los lugareños, temen que pase lo peor. Por el momento, los daños que muestra la vía entre Altamira y Calderas advierten que es indispensable “meterle la mano”, por lo que esperan que el gobernador de Barinas, Sergio Garrido, Intravial y la alcaldesa de Bolívar, Mayra Jaramillo, unan esfuerzos por resolver el problema de la vialidad en esta zona.