Un hombre que fue arrestado en Westminster Hall tras acercarse al féretro de la reina Isabel II y quitar el paño que lo cubría, quería comprobar que la monarca estaba realmente muerta, dijo el juez tras la comparecencia del detenido el martes.
El viernes, Muhammad Khan, de 28 años, hizo la kilométrica cola que conducía a la capilla ardiente de la soberana, fallecida el 8 de septiembre a los 96 años, a la que se acercaron unas 250.000 de personas para rendirle un último homenaje.
Una vez entró en el vestíbulo de Wesminster, Khan se salió de la cola hasta el ataúd y agarró con ambas manos la tela que lo cubría.
Rápidamente detenido por la policía, compareció el martes ante el tribunar de Wesminster por dos cargos de alteración del orden público.
El detenido “sufre alucinaciones y piensa que la reina no está muerta y que el rey Carlos tiene algo que ver con ello”, indicó el juez Michael Snow. También piensa “que podría ir al castillo de Windsor a rendirle homenaje [a la reina], pero porque cree que aún sigue viva”.
El juez no interrogó a Khan, ya que los médicos consideraron que no era apto para participar en el proceso. El joven solo confirmó su nombre, fecha de nacimiento, dirección, e intervino una vez.
Posteriormente fue liberado bajo fianza a condicón de que permaneca en un hospital psiquiátrico del este de Londres hasta su próxima comparecencia ante el mismo tribunal el 18 de octubre.
AFP