El número de muertes en Puerto Rico asociadas al huracán Fiona aumentó este martes a 21, informó el Gobierno de la isla en su portal oficial de estadísticas que preparó tras el paso del ciclón el pasado 19 de septiembre.
El desglose de los fallecidos son 13 bajo investigación, ocho confirmados, siete como muerte indirecta y una como directa, de acuerdo con la página.
El total de muertes se eleva a 21, después de que el pasado domingo el Departamento de Salud reportara 16 fatalidades relacionadas con el huracán.
La muerte clasificada como directa por el huracán corresponde a un hombre de 58 años en Bayamón, municipio vecino a San Juan.
Mientras que, las tres muertes indirectas responden a un hombre de 50 años de la región de Mayagüez, un hombre de 56 años y una mujer de 74 años del municipio de Caguas.
La semana pasada, la Policía puertorriqueña informó de varias muertes relacionadas con los efectos del huracán.
Un hombre de 70 años, que se encontraba en un cuarto de su residencia manipulando un generador eléctrico, el cual explotó, murió calcinado en el barrio Hato Arriba en el pueblo de Arecibo.
En el municipio de Comerío otro hombre falleció tras ser arrastrado por las aguas del río La Plata y una mujer de 89 años falleció en un incendio provocado por una vela en la localidad de San Sebastián.
El portal detalla la edad, género, región y fecha de los fallecidos, siendo la última ocurrida la de un hombre el pasado 21 de septiembre en Bayamón, municipio aledaño a San Juan.
La página también explica que un caso fatal confirmado es cuando la muerte de una persona en el certificado de defunción se hace referencia al huracán Fiona, o su equivalente, como un factor en la causa de muerte.
Mientras, un caso fatal por desastre directamente relacionado es la de una muerte directamente atribuible a las fuerzas del desastre o por las consecuencias directas de estas fuerzas, como colapso estructural, escombros voladores o exposición a radiación o sustancias químicas.
Ejemplo de ellos son quemaduras, aplastamiento, ahogamiento, electrocución, caídas, envenenamiento por radiación o químicos, inhalación de gases o humo por fuego.
EFE