Los equipos de rescate han hallado hoy el cadáver de un hombre, la octava víctima mortal del corrimiento de tierra ocurrido en la isla italiana Ischia (sur), que causó además cientos de desplazamientos, mientras continúan la búsqueda de las cuatro personas que permanecen desaparecidas.
El último cadáver fue localizado esta mañana en la localidad de Casamicciola, la más afectada por el desprendimiento ocurrido en la noche del pasado sábado, mientras aumenta la polémica por las amnistías aprobadas en el pasado para la construcción de casas en la isla italiana.
Tras el derrumbe, hasta el momento se han recuperado ocho cadáveres, entre ellos los de dos niños y un recién nacido, mientras continúan sin descanso las operaciones para buscar a las cuatro personas que siguen desaparecidas. Además, hay 4 heridos y 230 desplazados.
El trabajo de búsqueda se concentra sobre todo en el sótano de una de las casas arrasadas por el desprendimiento de una parte de la montaña, pero para acceder a él es necesario completar la limpieza del camino de acceso.
El camino se encuentra cubierto de barro, uno de los obstáculos más difíciles de eliminar en las distintas zonas afectadas por el derrumbe, según explican los socorristas.
Los equipos continuaron con la búsqueda durante toda la noche, sobre todo en la zona donde se encontró a dos de los niños, porque es muy probable “que en ese punto estén también los otros desaparecidos, pero es complicado porque a esa zona sólo se puede llegar a pie”, explicó el jefe de comunicación de los bomberos Luca Cari.
En la actualidad, un tercio de las 60.000 casas de Ischia pidieron una amnistía por haber sido construidas donde no se debe, según la asociación Legambiente.
El jefe del Departamento de Protección Civil, Fabrizio Curcio, advirtió de “que más del 94 % de los municipios corren peligro de corrimientos y de inundaciones por el riesgo hidrogeológico”. EFE