La Navidad se distingue por ser una festividad en la que todos aprovechan para rodearse de sus seres queridos, degustar grandes cenas, dar y recibir regalos, adornar sus hogares, entre otras cosas que los llenan de alegría. Sin embargo, hay quienes la odian y buscan todo lo contrario, así lo reseñó INFOBAE.
Existen algunos personajes que no están conformes al quejarse de la festividad y con sus actos intentan arruinársela a todos. En lugar de dejarse contagiar con el espíritu navideño desean que los demás se amarguen, convencidos de que la fecha solo es una excusa para consumir, contaminar y ser mal agradecidos con los demás por lo poco que pueden ofrecer.
De tal modo, algunos de los personajes que se distinguen como los “malos” de la Navidad se encuentran a continuación:
‘¡Como el Grinch robó la Navidad!’ del Dr. Seuss se publicó en 1957. Recibió varias adaptaciones a otros medios que incluyeron teatro y televisión, pero la más recordada fue la adaptación cinematográfica del año 200 con Jim Carrey interpretando al personaje (Universal Studios)
El Grinch
Verde y peludo, el Grinch es uno de los personajes más icónicos por despreciar la época. Año con año esta historia basada en un cuento del Dr. Seuss en 1957 es recordada con cariño.
A pesar de que el Grinch se quiso robar la Navidad junto a su inseparable perro Max, por odiar a los Quiénes de Villa Quién por su consumismo y considerarlos unos malagradecidos, su historia muestra un lado más sensible con el que las personas pueden comprenderlo e incluso sentirse identificadas con él.
El Grinch cuenta con varias versiones que van desde cuentos escritos hasta animaciones y adaptaciones con actores.
El señor Scrooge
Scrooge: Un cuento de Navidad es una historia creada por Charles Dickens en 1843, que a pesar del cambio de siglo y un sinnúmero de eventos históricos, es una de las preferidas en todo el mundo.
Ebenezer Scrooge, el protagonista de esta historia, es un hombre de avanzada edad que odia la temporada y con su actitud termina afectando a personas cercanas a él; sin embargo, su perspectiva cambia drásticamente luego de ser visitado por tres espíritus que lo llevan a diferentes épocas.
Los ladrones Harry y Marv
Mi Pobre Angelito, protagonizada por Macaulay Culkin como Kevin, es otro clásico navideño que, de no ser por Harry y Marv, los dos ladrones que intentan entrar a su casa, no sería igual la historia.
Hay quienes en esta fecha aprovechan que muchas familias se llenan de abundancia para intentar robarles; dejándoles un sabor amargo si lo logran. Algo parecido ocurre con los ladrones de la película que aprovecharon que la familia de los McCallisters salió de vacaciones para entrar a robar a su casa, llevándose la sorpresa de que Kevin seguía ahí, lo cual desató una serie de eventos desafortunados y graciosos para los espectadores.
Gremlins
Regresando a seres de color verde que arruinan la Navidad, están los Gremlins, quienes fueron retratados en la película homónima dirigida por por Joe Dante en 1984.
El filme de horror-comedy muestra a los pequeños monstruos que nacen, luego de que Billy, el cuidador de Guizmo, un Mogwai, no respeta las reglas de estos seres, y pronto comienzan a arruinar las fiestas de la temporada con actos disparatados. Para revertirlo los protagonistas deben de pasar por varias cosas.
Oogie Boogie
En la película de El extraño mundo de Jack, dirigida por Henry Selick en 1993 (y concebida en la mente de Tim Burton), el Oggie Boggie es quien intenta impedir que la lúgubre tierra de Halloween participe en su primera Navidad.
Aunque Jack fue quien planeó evitar que Santa Claus de la tierra de la Navidad repartiera sus regalos, nunca intentó cancelar la festividad, pues a su modo quería celebrarla. Sin embargo, el Oggie Boggie sí tenía malas intenciones al secuestrar a Santa; por fortuna el Rey Calabaza logra resolver la situación y revertir todo lo que salió mal.
Krampus
Por último, el más malvado de todos: Krampus, una criatura demoníaca con orejas puntiagudas, patas de cabra y cuernos que aparece cada diciembre para secuestrar niños y llevárselos con él al inframundo.
Esta leyenda nació en el folclore de países alpinos como Austria, Alemania, Francia, Italia, Liechtenstein, Mónaco, Eslovenia y Suiza. En lugar de cargar un saco de regalos como Santa Claus lleva en su espalda un saco para llevarse a los menores, así como palos de abedul para golpear a los que merezcan castigo.
La tradición indica que Krampus se presenta el 5 y 6 de diciembre, en una fecha conocida como Krampusnacht, momento en que se lleva a niños malportados y que no tienen espíritu navideño.
Por varios años la Iglesia Católica suprimió esta leyenda navideña, prohibiéndola en la temporada, además, los fascistas, durante la Segunda Guerra Mundial acusaron que este ser demoníaco era un invento de los socialdemócratas.
A pesar de que se mantuvo oculto por décadas, en el último siglo ha tenido un revuelo, pues a nivel mundial se ha vuelto a hablar de Krampus, en parte por películas de terror y series televisivas que lo han retratado.
Si bien no todos los “malos” han querido robarse la Navidad, con sus acciones terminan arruinando la temporada de sus víctimas. No importa si es la falta de aguinaldo, un robo o el secuestro de un hijo, todas son cosas que nunca nadie desearía; menos cuando están celebrando con sus seres queridos.