Un ciudadano venezolano y otro colombiano han sido detenidos este miércoles en la ciudad ecuatoriana de Guayaquil tras el ataque en un hospital contra un paciente al que custodiaban y que la semana pasada resultó herido cuando desconocidos dispararon contra el vehículo en el que se movilizaba.
Según las primeras versiones, sujetos armados ingresaron en la madrugada por el área de emergencia del hospital y presuntamente intentaron llegar a la habitación del hombre que sufrió el atentado el pasado viernes.
Esta persona tenía una “custodia de una forma inusual al interior del hospital, quienes, al escuchar los disparos de arma de fuego se activaron y realizaron disparos contra un individuo que subía”, presuntamente a atentar contra la vida del paciente, relató Fábari Montalvo, subcomandante de la Zona 8 de la Policía.
En declaraciones a la prensa, apuntó que la Policía detuvo a los dos individuos que actuaban como seguridad del paciente y, además, encontraron tres armas de fuego de calibre 9 milímetros en un piso cercano al lugar de los hechos.
Montalvo comentó que no había ningún tipo de autorización para la custodia civil con armas de fuego en el interior del hospital, y que tampoco la Policía tenía orden judicial para custodiar al paciente que se recuperaba de las heridas sufridas en el atentado del pasado viernes.
El paciente ya fue dado de alta del hospital y fue trasladado a su domicilio por sus familiares, indicó Montalvo al añadir que tras el ataque la Policía halló un vehículo incinerado, en cuyo interior había “municiones de las mismas características que las que se encontró en el lugar de los hechos”.
“Ese vehículo fue utilizado por los delincuentes para trasladarse al hospital y salir del hospital en precipitada carrera”, dijo al señalar que, según versiones preliminares, entre tres y cuatro personas participaron en el ataque “de las cuales una fue abatida”.
El hecho violento ocurrió a la madrugada y la balacera se prolongó hasta los exteriores del hospital, por lo que los rastros del tiroteo se evidenciaban en la fachada del hospital y en un edificio aledaño, según los reportes de prensa.
Se trata del segundo caso violento registrado en una casa de salud, luego de que el pasado 27 de noviembre, unas 7 personas con fusiles ingresaran en un hospital en la ciudad costera de Chone, en la provincia de Manabí, con la aparente intención de asesinar a un joven de 16 años, supuesto integrante de un grupo delincuencial, que había resultado herido en una balacera un día antes. EFE