Como parte de una convocatoria nacional, un grupo de los trabajadores fijos, jubilados y maestros técnicos del Instituto Nacional de Capacitación Socialista (INCES-Apure) protestaron este jueves 19 de enero en las instalaciones de esta institución para exigir no solo aumento salarial, sino también la cancelación de las deudas pendientes desde mayo de 2021 hasta la fecha, el cumplimento de compromisos contractuales y la discusión del contrato colectivo.
María Eugenia Díaz // Corresponsalía lapatilla.com
Los manifestantes dicen estar cansados de las burlas del INCES, tras el levantamiento de 26 convocatorias en el Ministerio del Trabajo para establecer acuerdos, y hasta hoy no han recibido sin obtener respuesta del patrono.
Ana Hernández, secretaria general de la seccional Apure del Sindicato Nacional de los Trabajadores del INCES (SINTRAINCES), pidió a la directiva cumplir con los compromisos contractuales adquiridos con los trabajadores, tales como el bono de producción del año 2022, incentivo al ahorro, dotación de uniformes de 2021 y 2022, la activación del seguro de Hospitalización, Cirugía y Maternidad (HCM), caja de ahorros y actualización del fideicomiso.
Otra de las solicitudes de los empleados públicos es la eliminación del instructivo de la Onapre y el respeto a la contratación colectiva de los trabajadores.
“De las 26 convocatorias hechas ante el Ministerio del Trabajo, el INCES solo ha asistido a 11. Hoy nos dejaron embarcados en el Ministerio del Trabajo, donde se esperaba discutir algunas cláusulas contractuales. ¡Ya basta de burla! Todos comemos, tenemos familia. Al aprobar el instructivo Onapre, devaluaron los sueldos completamente, inclusive, las primas”, dijo la sindicalista para lapatilla.com
Hernández rechazó que el INCES clasifique a los trabajadores de primera a unos, y a otros de segunda. “A los trabajadores de primera les dan el beneficio de bolsa de alimentación, proteínas y ferias agrícolas. Mientras que a los trabajadores de las regiones reciben un salario pírrico. Basta de atropellos a los trabajadores”, declaró Hernández.
Los manifestantes exigen al INCES-Apure garantizar las condiciones de trabajo para unos 14.000 trabajadores de todo el país, tal como lo establece la Constitución.
“El INCES se niega a firmar un acta convenio donde se comprometan o den alternativas para ajustar cláusulas de tipo económico para mejorar los salarios. El trabajador con más alto sueldo no llega a 30 dólares mensuales. El sueldo no cubre ni el pasaje de los trabajadores. Estamos sumergidos en una situación precaria”, alertó la vocera sindical.