Colombia marcó en 2022 el “lamentable récord” de homicidios de líderes sociales y personas defensoras de derechos humanos con un total de 215 asesinatos, informó este lunes la Defensoría del Pueblo.
La mitad de estos crímenes ocurrió en cinco departamentos: Nariño (35), Cauca (26), Antioquia y Putumayo (22) y Valle del Cauca (12), coincidiendo con las zonas del país donde hay más presencia de grupos armados ilegales.
El tipo de liderazgo que más fue afectado fue el de los líderes comunales con 63 asesinados.
Le siguen los líderes indígenas (47), comunitarios (36), campesinos o líderes agrarios (18), afrodescendientes (12), sindicales (8), activistas de derechos humanos (7), culturales o deportivos (5), líderes de población con orientación sexual e identidad de género diversas (4) y servidores públicos (3).
“No solo se trata de cifras, hay que pensar en 215 familias duramente golpeadas y en las comunidades afectadas que se quedan sin las personas que luchan por sus derechos”, lamentó el defensor del Pueblo, Carlos Camargo.
Además, supone “una grave afectación para la base de la democracia porque se trata de líderes que recogen las inquietudes de la gente, son sus voceros y los que trabajan por un país donde se respeten los derechos humanos”.
Entre 2016, cuando la Defensoría puso en marcha el Sistema de Alertas Tempranas (SAT), y 2022, fueron asesinados en el país 1.113 líderes sociales.
En 2016, fueron asesinados 133, en 2017 la cifra llegó a 126, en 2018 el registro fue de 178, en 2019 fueron 134, para 2020 subió a 182 y en 2021 alcanzó las 145 víctimas mortales.
“Se esperaría que los diálogos con (la guerrilla de) el ELN y el cese bilateral (del fuego) con otros grupos armados ilegales signifique también una disminución de las acciones contra líderes y lideresas sociales y personas defensoras de derechos humanos en todo el territorio nacional y se ponga fin a esta situación en contra de esta población”, concluyó Camargo. EFE