Recrudece la crisis del transporte en Maturín porque no hay gasolina

Recrudece la crisis del transporte en Maturín porque no hay gasolina

 

 

La falta de combustible que desde hace más de un mes se registra en todo el estado Monagas, ha hecho que se agrave la situación del transporte público en Maturín.





Corresponsalía La Patilla

En los últimos días, muchos usuarios se las han “visto negras”, pues deben esperar hasta hora y media en una parada para abordar una unidad.

El problema para los ciudadanos es más frecuente en los sectores populares para ir al centro de la ciudad en horas de la mañana, ya que son pocas las unidades de transporte activas. Muchos transportistas deben hacer interminables colas para abastecer los tanques de sus vehículos, y allí pierden horas y horas de trabajo.

Migdalia Pineda, quien reside en el sector de La Floresta, manifestó que en los últimos días se ha hecho muy cuesta arriba usar el transporte público por la poca cantidad de autobuses y carritos por puesto que están trabajando. Afirma que ha pasado más de una hora en la parada esperando un vehículo, al tiempo que criticó el silencio de las autoridades chavistas en relación al tema.

Recrudece la crisis del transporte en Maturín porque no hay gasolina

 

 

 

 

Las colas en todas las estaciones de servicio son brutales. Uno como usuario entiende que no haya mucho transporte. En situaciones normales, no paso ni cinco minutos en la parada para ir al centro, pero en los últimos días ha sido horrible poder movilizarse. Desde mediados de diciembre cuando que el gobernador dijo que se iba a normalizar el suministro de gasolina, no ha vuelto a decir más nada ni siquiera para explicar a qué se debe esta escasez”, cuestionó Pineda.

No obstante, un transportista de la ruta 6, que por temor a represalias prefirió no identificarse, expresó que el problema del combustible parece estar lejos de normalizarse. En su caso, ha tenido que amanecer en una cola para surtirse y la cantidad de litros que recibe (120 litros) apenas alcanza para tres o cuatro vueltas.

Por su parte, William Guerra, conductor particular, contó que puede pasar hasta tres días en una cola para equiparse con 40 litros. En las estaciones dolarizadas, las filas también son kilométricas, situación que anteriormente solo se veía en las bombas subsidiadas.