“Ellos apuestan al desgaste, al cansancio. Nosotros apostamos a la unión, al trabajo, a las reivindicaciones salariales y a nuestra dignidad. ¡Docentes! Aquí nadie se rinde, juntos somos más”, decía una pancarta de los docentes de la Escuela Básica Simón Jiménez, que fue llevada este jueves a la protesta, en la avenida 23 de Enero con Guaicaipuro, específicamente en la esquina de La Floresta, en Barinas.
Por Corresponsalía La Patilla
La convocatoria volvió a ser multitudinaria. Esto le da fuerza a lo escrito por los docentes en la pancarta que llamaba la atención, debido a que mientras el régimen madurista hace mutis ante los reclamos de los trabajadores de la administración pública, los afectados no tienen pensado abandonar la lucha, porque para ellos es vencer o morir de hambre.
La calle los ha hecho familiares, y cada vez asisten con el mismo fervor de hace un mes (9 de enero), cuando dieron inicio a las protestas y, en el caso de los docentes, decidieron exigir un mejor salario, la restitución de sus beneficios laborales, entre otros aspectos que el régimen les arrebató de un plumazo.
A la iniciativa de los docentes se sumaron los empleados y obreros, profesores universitarios, jubilados de Pdvsa, Poder Judicial, Corpoelec, policías, que han hecho de esta lucha la más exitosa por la acogida de sus participantes, quienes indistintamente de su ejercicio laboral, tienen las mismas necesidades económicas, porque lo que el régimen les paga no les alcanza.
