Chile prevé que extinción total de incendios no se logre hasta marzo

Chile prevé que extinción total de incendios no se logre hasta marzo

Fotografía de las afectaciones de los incendios en las regiones de Biobío y Ñuble (Chile), el 3 de enero de 2023. Las regiones de Biobío, Ñuble y La Araucanía son las más afectadas por unos incendios que ya han destruido más de 45.000 hectáreas y un centenar de viviendas y han provocado el desalojo de decenas de municipios. Los incendios coinciden con una larga sequía que ya dura más de trece años y con una ola de calor inédita en el sur, con temperaturas que pueden llegar en las próximas horas hasta los 40 grados celsius en zonas del sur. EFE/ Javier Conce.

 

La ministra portavoz del Gobierno de Chile, Camila Vallejo, vaticinó este viernes que la “extinción total” de los devastadores incendios que sacuden el centro sur de Chile desde hace una semana, y que han quemado cerca de 360.000 hectáreas, no se logrará antes de la primera quincena de marzo.

“Los incendios pueden estar controlados, pero no extintos. (…) Lo importante ahora es disponer de todas las capacidades para lograr controlar los incendios, que no se sigan expandiendo, y luego viene el proceso de extinción para que no se reactiven”, expresó la portavoz del ejecutivo chileno ante los medios.





Vallejo aseguró que, más allá del combate directo del fuego, “lo importante es que no se generen nuevos incendios”, ya que, además del centro sur del país que se ha visto afectado por las llamas, las regiones del centro están en alerta máxima por la potencialidad de grandes incendios forestales.

La ministra hizo un llamado a la ciudadanía para no hacer ninguna acción que pueda generar nuevos focos: “El cambio climático genera condiciones propicias para que un incendio se expanda, pero el origen principal de los fuegos es, lamentablemente, la acción humana”, remarcó.

Los incendios, que cumplen una semana y todavía no han sido controlados, han causado ya la muerte de 24 personas, arrasado más de 1.250 viviendas y causado más de 5.500 damnificados en las regiones de Ñuble, Biobío, La Araucanía y Maule.

La falta de medios -en Chile el cuerpo de bomberos no es profesional-, la mala gestión de los bosques y las adversas condiciones climáticas han acelerado la tragedia, la más grave de esta naturaleza en el país.

EFE