Las ocho frases para la historia que ha dejado Shakira en su primera entrevista contra Piqué

Las ocho frases para la historia que ha dejado Shakira en su primera entrevista contra Piqué

Shakira concede su primera entrevista y habla de Piqué y Clara Chía / GETTY IMAGES

 

Por fin escuchamos a Shakira confesar lo que siente y piensa sobre Gerard Piqué y Clara Chía, más allá de las canciones. La entrevista en exclusiva que concedió al periodista mexicano Enrique Acevedo no ha sido otra ‘tiradera’, pero sí ha desvelado en qué momento se encuentra la cantante colombiana al respecto de su brutal separación del ex deportista.

Por mujerhoy.com





Tenía que pasar: Shakira ha hecho un ‘upgrade’ acelerado de su manera de concebir el amor. Dicho crudamente: Shakira ha dicho adiós a sus desfasadas ideas del amor, más propias de una veinteañera del siglo pasado, y se ha subido al tren del siglo XXI.

Decepciona un poquito que haya decidido ponerse filosófica en vez de soltar sus balas verbales directamente contra Gerard Piqué o Clara Chía, pero no lo vamos a negar. Supone otro regalo para sus fans acceder al proceso que está haciendo tras el bombazo de la ‘Sesión 53’ de Bizarrap. Estas son las ocho frases para la historia que nos ha dejado su entrevista.

«Hay un lugar en el infierno para las mujeres que no apoyan a las mujeres»

«Me he dado cuenta de que las mujeres estamos en un momento realmente clave para la sociedad. Estamos en un punto en el que el apoyo que podamos recibir las unas de las otras es muy relevante, es importantísimo».

« Madeleine Albright, secretaria de Estado estadounidense, tiene una frase que me encanta: «Hay un lugar reservado en el infierno para las mujeres que no apoyan a las otra». Y estoy completamente de acuerdo».

«He sido una mujer dependiente de los hombres»

«Yo también compraba esa historia de que una mujer necesita a un hombre para completarse. También tuve ese sueño de tener una familia en la que los hijos contaran con un padre y una madre bajo el mismo techo. No todos los sueños en la vida se cumplen, pero la vida encuentra una manera de compensarte y conmigo lo ha hecho con dos niños maravillosos que me llenan de amor cada día».

«También he de confesar que siempre he sido una mujer bastante dependiente emocionalmente de los hombres. En mis relaciones he sido una enamorada del amor y creo que esta historieta de alguna manera he logrado entenderla desde otra perspectiva».

«Lo contrario de la depresión es la expresión»

«Hoy siento que me basto a mí misma. Cuando una mujer tiene que enfrentar los embates de la vida se fortalece. Sales fortalecida cuando has aprendido a conocer tus propias debilidades, las aceptas y expresas eso que se sientes, ese dolor».

«Dicen que lo contrario de la depresión es la expresión (es una frase de una autora sobreviviente al Holocausto de un libro que estuve leyendo hace poco). Pero sí, yo creo que he logrado sentir que yo soy suficiente, cosa que jamás pensé que podía pasar».

«Ahora sí me siento completa»

«Ahora, paradójicamente sí me siento completa. Siento que dependo de mí misma. Y, además, tengo dos niños que dependen de mí, así que tengo que estar más fuerte que una leona. Pero para que esa fortaleza sea verdadera y no una fachada tiene que ser resultado de vivir un duelo, de tolerar la frustración. Hay cosas que no salen como una quiere. Las cosas se rompen y hay que recoger los pedacitos del suelo y sobrevivir».

«Se puede sentir amistad con miles de personas»

«Ha sido un momento de honestidad brutal tanto por mi parte, como de mi público conmigo. También de descubrir quiénes son mis verdaderos amigos: cuando sucede esto sabes con quién cuentas y con quién no».

«Me he dado cuenta de que la amistad no es un fenómeno que sucede a nivel individual, persona a persona, sino que puede suceder con miles de personas. Me he sentido tan apoyada por mi público de una manera que jamás esperé. Cuando estaba en el suelo, y estuve un buen rato en el suelo, me dieron y el valor y la fuerza para levantarme y decir: venga, otro ‘round’».

«Gracias a Bizarrap pude pensar en el dolor»

«Mis letras y mis canciones, en general, son más elocuentes que yo misma. No he intentado otra cosa más que ser honesta y utilizar mi música como una catarsis, una terapia. Mis canciones son más eficaces que una visita al psicoanalista. Alguien debió sacar una foto del antes y el después del día que trabajé con Bizarrap. Entré al estudio de una forma y salí de otra».

«Me alegro de que me diera una oportunidad para desahogarme porque fue necesaria para mi sanación. Si no hubiera tenido esa canción, esa capacidad de expresarme, no habría podido pensar en el dolor. Hay que sentir lo que hay que sentir cuando se experimenta una decepción, un desamor, un vacío».

«2022 fue un año cabrón. Es extraño y cruel cómo la vida tiene que valerse de estos momentos tan cabrones para desarrollar músculos emocionales que no sabía que tenías».

«A pesar del éxito, sufro el síndrome del impostor»

«Sufro levemente del síndrome del impostor. Todavía no me creo que soy tan capaz como dicen, tan hábil, tan creativa o tan talentosa. Quizá esa pequeña patología me mantiene motivada, queriendo descubrir quién soy y lo que puedo dar. Es una duda sana».

«Constantemente tengo una deuda conmigo misma: quiero comprobar si realmente tengo talento o si aún me queda, si no ha desaparecido. Eso es lo que me da ganas de volver al estudio de grabación y, ahora, tengo más ganas que nunca».

«Me fabriqué un final feliz que no ha podido ser»

«Imaginaba que, a mi edad, iba a estar en una finca, criando pollos, ordeñando vacas y criando a mis hijos. Bueno, no, de chiquita soñaba que iba a estar como estoy ahora. Fue de grande cuando empecé a fabricarme mi propio final feliz. Sin embargo, la vida ha decidido colocarme en posiciones a veces incómodas, creo que para poder dar un entendimiento de cómo viven los demás».

«A veces creo que he vivido más de una vida: he conocido la riqueza, la pobreza, los halagos, la discriminación, el prejuicio… Siempre estoy cambiando mi punto de vista, porque me hace falta. Y eso es la vida. El dolor no es más que una emoción, pero es parte de la vida».

«Ahora ya voy de subida. Tengo más confianza en mí misma. Lo difícil para el ser humano cuando le toca enfrentar situaciones inesperadas es que no sabemos cómo lo vamos a hacer. No creemos en nuestra propia resiliencia. Yo no sabía que era fuerte. Pensé que era frágil y es verdad que tengo un poco de todo. Hay que tener fe y ser uno mismo».