La Armada rusa repelió esta madrugada un ataque de drones contra Sebastopol, en la península ucraniana de Crimea, anexionada por Rusia en 2014 y la principal base de la Flota rusa del mar Negro, aseguró hoy el gobernador, Mijaíl Razvozháev.
“En la madrugada, nuestra flota repelió un ataque de drones de superficie”, escribió en su cuenta de Telegram.
En total, tres drones han sido destruidos, indicó, al tiempo que afirmó que los aparatos no tripulados “intentaron penetrar en la bahía”, pero que los marineros rusos les dispararon.
Razvozháev también aseguró que la defensa antiaérea derribó “un objetivo aéreo”.
El gobernador de Sebastopol indicó que los buques de guerra rusos “no sufrieron daños” en el ataque, en el que tampoco hubo heridos.
“Nuestras fuerzas armadas rechazaron con confianza y calma el ataque de drones enemigos en Sebastopol. La situación está bajo control. Todos los servicios operativos están listos”, escribió Razvozháev.
El supuesto ataque ucraniano con drones de superficie se produce solo un día después de que las autoridades impuestas por Rusia en Crimea denunciaran otro con drones contra la ciudad de Dzhankói, en el norte de la península, considerado un nudo ferroviario desde el que Rusia suministra armas a las provincias de Jersón y Zaporiyia.
El presidente ruso, Vladímir Putin, que visitó el sábado por sorpresa Sebastopol con motivo del noveno aniversario de la anexión de Crimea, dijo en la víspera de la efeméride que Rusia hará todo para prevenir amenazas a la seguridad de la península.
En la campaña militar que Putin ordenó iniciar el 24 de febrero de 2022, Rusia ha conseguido crear un corredor terrestre entre el Donbás, en el este de Ucrania, y Crimea, en el sur, que necesita para su supervivencia los recursos hidrológicos, energéticos y agrícolas del sur de Ucrania.
Con la anexión ilegal en septiembre pasado de las regiones ucranianas de Lugansk, Donets, Zaporiyia y Jersón, Rusia convirtió el Azov en un mar interior, lo que, en principio, garantiza la seguridad de Crimea, que ha creado además una línea de fortificaciones.
En los últimos trece meses, Crimea ha sido objeto de varios ataques atribuidos a Ucrania.
La península se convirtió en agosto de 2022 en objetivo enemigo a raíz de una operación de sabotaje contra un arsenal del Ejército ruso y unas sospechosas explosiones en un aeródromo ruso.
En octubre pasado el puente de Crimea, joya de la corona de Putin y que une la ocupada península con Rusia, quedó fuertemente dañado por un atentado con explosivos atribuido por Moscú a Ucrania. EFE