Los Santos, en Santander, es el segundo nido sísmico activo en el mundo, después de la región del Hindu kush (Afganistán) y superando a los famosos montes Cárpatos (Rumania).
Por eltiempo.com
Según los sismógrafos instalados en el cañón del Chicamocha, diariamente se registran en el pueblo entre 12 y 20 movimientos, la mayoría imperceptibles.
En este lugar, se originó el pasado 10 de marzo el movimiento de 5,9 de magnitud en la escala de Richter que despertó a miles de colombianos a las 4:20 de la madrugada, que por suerte ocurrió a una profundidad de más de 150 kilómetros.
Y así se movió la tierra esta mañana, a las 4:19 A.M. Miren cómo esa vía que ya está bastante deteriorada se mueve de lado a lado… El video es de San Gil, #Santander #Temblor #Santos pic.twitter.com/hMN82YYZVd
— Mely Múnera (@MelyMunera) March 10, 2023
Lo bueno de una emergencia como estas es que existen posibilidades de afrontarlas y enfrentarlas y para esto crearon el único simulador de terremotos móvil que tiene el país y está en Bucaramanga.
El proyecto fue ideado por un equipo de ingenieros electrónicos, mecánicos y funcionarios de búsqueda y rescate.
El simulador es una muestra de lo que es la experiencia en su totalidad de qué pasaría si la vivienda, las vías, y los edificios se caen y se abren tras un fuerte temblor.
La idea es ingresar al simulador móvil para que la persona tenga las herramientas y esté preparado para que si llegase a pasar una emergencia sepa cómo actuar, teniendo en cuenta que en esos momentos de pánico la gente suele entrar en shock y en muchas ocasiones no sabe qué hacer.
Son 4 largos minutos de experiencia. Los primeros 60 segundos serán los más fuertes y traumáticos.
El visitante se sienta en una silla, se pone un casco y comienza a sentir un temblor de magnitud 9 con una profundidad mínima en el que se vive cómo los muebles de la sala de una vivienda comienzan a moverse de lado a lado, se caen las lámparas, los libros caen encima de las personas, se quiebran las instalaciones, se origina un incendio por las fallas eléctricas del momento y hay fugas de gas.
La persona que vive el temblor ven cómo sale corriendo llena de susto de su casa y al estar afuera evidencia cómo colapsan las estructuras alrededor, cómo los vehículos se mueven sin control y cómo los puentes se caen.
Como si fuera poco el miedo y temor que se vive en ese momento, también comienza a registrase un Tsunami.
Quien viva la experiencia evidenciará la inundación de la ciudad y verá cómo un barco ingresa entre carros, buses y gente intentando salvarse, y cómo la localidad se va destruyendo poco a poco.
“Son cosas que la gente no alcanza a dimensionar, la gente sale muy preocupada, dicen: yo creí que no era cierto, no lo he vivido. Los otros tres minutos explican el origen de los sismos, también manejamos un público infantil, los capacitamos como los pequeños brigadistas del hogar, después de la simulación hay charlas teóricas en donde se es explica sobre el tema”, contó Omar Fernando Rangel Ballesteros, coordinador del programa lúdico pedagógico Siete Pasos Adelante.
El primer paso es prepararse para conocer los planes de contingencia, sentir la vulnerabilidad y amenazas que se viven en el momento.
Uno de los pasos más importantes es tener un plan familiar de emergencia que se basa en conocer el plano de su vivienda, las marcaciones seguras, cuáles son las zonas de riesgo. Además, contar con un kit de emergencia y una maleta con algunas provisiones.
“Es una plataforma vibratoria sensorial fusionándola con la realidad para que se conozca este evento de gran magnitud, es un video, son vibraciones, movimiento. Las personas se preparan, como hacen en la NASA con astronautas, o la simulación de viaje con los pilotos”, relató Omar.
La explicación de un temblor
A los participantes les enseñan que los sismos no se dan por el cambio drástico de temperaturas, como en algún momento se ha informado.
Omar explicó que un terremoto es una acción natural que lleva miles de millones de años y que se origina por una fuga de energía, tras los movimientos de las placas tectónicas.
“Al quebrarse esa placa hay una fuga de energía que origina un movimiento sísmico, y todo depende de la acumulación de energía y la profundidad a la que se fracture la placa, entonces, por ejemplo, Santander, afortunados que las fracturas de placas son profundas”, explica el experto.
Luego de esta asesoría y la vivencia de un sismo de magnitud nueve, las personas salen impactadas de la experiencia, muchas de ellas no dimensionan la gravedad de una emergencia como estas.
“Muy horrible, no estuve en el terremoto, pero si fue así, terrible, quedé terrible, tengo las manos abiertas de hacer fuerza”, dijo en medio de una voz agitada una de personas que vivió su experiencia en el simulador.
“Estoy muerta de miedo, la idea era esa, yo recomiendo que las personas vengan a este mundo interactivo, se da uno cuenta que no está preparado para esta experiencia”, dijo otra beneficiaria de este simulador.
Este proyecto inició en el 2015 y ha logrado impactar a 65 mil personas del Eje Cafetero, Tolima Bogotá y Bucaramanga.
Esta actividad la contratan en su mayoría las empresas privadas, Alcaldías y Gobernaciones que estén en alto riesgo o vulnerables.
“Por lo general, las Alcaldías sacan de su presupuesto, el costo es de acuerdo a los días de desplazamientos, los días que nos quedamos en el lugar. Por ejemplo, en Semana Santa tenemos un evento en Valledupar, el costo, es más, porque toca trasladarlo, teniendo en cuenta que estamos en Bucaramanga”, explicó Omar.
El grupo Empresarial Red Colombia, entidad que hace esta actividad en ocasiones utiliza los recursos propios para educar a comunidades de sectores vulnerables.
Una de las personas que vivió el sismo de magnitud nueve… Si salió así de blanca y asustada, no me quiero imaginar lo que se siente. pic.twitter.com/MQdIa7I0S9
— Mely Múnera (@MelyMunera) March 23, 2023