La actividad del volcán Nevado del Ruiz sigue siendo “muy inestable” y por ello el Servicio Geológico Colombiano (SGC) decidió mantener este sábado la alerta naranja, que corresponde a erupción probable en término de días o semanas.
“La actividad del volcán Nevado del Ruiz continúa muy inestable, por lo que se recomienda a la comunidad conservar la calma, seguir todas las instrucciones de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) y autoridades locales, y estar atenta a la información proporcionada por el Servicio Geológico Colombiano sobre la evolución del estado del volcán”, detalló el SGC en un comunicado.
El organismo explicó que la “actividad sísmica asociada a fracturamiento de roca al interior del edificio volcánico continúa localizada en el sector suroccidental del volcán, a profundidades entre 2 y 4 kilómetros y a una distancia del cráter similar a las reportadas en días anteriores”, que es de 2 a 4 kilómetros.
En ese sentido, el viernes fueron registrados 3.400 sismos y este sábado, hasta las 9.00 hora local (14.00 GMT) ocurrieron 800.
“La sismicidad relacionada con el movimiento de fluidos al interior de los conductos volcánicos estuvo asociada a varias emisiones pulsátiles y continuas de ceniza que fueron confirmadas a través de las cámaras web utilizadas para el monitoreo volcánico y por reportes de habitantes en los sectores de la vereda La Cabaña”, en el departamento del Tolima (centro), agregó la información.
La altura máxima de la columna de gases y ceniza observada fue de 1.500 metros, medidos desde la cima del volcán con una dirección de dispersión preferencial hacia el suroriente.
“La salida de dióxido de azufre a la atmósfera se mantiene en niveles similares a los observados en días anteriores. Se tuvo el reporte de anomalías térmicas localizadas en el cráter Arenas”, precisó el SGC.
Situado en el Parque Nacional de los Nevados entre los departamentos de Caldas y Tolima, este volcán tuvo una erupción el 13 de noviembre de 1985 que causó la mayor catástrofe natural del país.
Debido a la erupción se derritieron sus glaciares lo que provocó una avalancha que arrasó la población de Armero (Tolima), donde murieron más de 23.000 de sus 25.000 habitantes.
EFE