La población vulnerable del municipio Pedro María Ureña en Táchira se ve seriamente afectada por los cobros por encima de los precios reales con que les venden el gas doméstico en moneda colombiana.
Por Anggy Polanco / Corresponsalía lapatilla.com
Tulio Ernesto Hernández, habitante del municipio Pedro María Ureña, denuncia que los precios del gas en la localidad fronteriza llegan con una recarga sobre el precio real del 600%.
Hernández relató que cuando ha denunciado esta situación ante las autoridades municipales, de forma jocosa le han dicho que hable con el gobernador a ver si él le resuelve.
El ciudadano exigió al gobierno regional de Táchira a que publique los precios oficiales del gas en bolívares y los costos que acarrea el transporte de cada bombona a fin de evitar la corrupción.
Propuso la necesidad de que en Ureña se construya una planta de llenado para atender a los habitantes de la frontera, puesto que desconocen a qué bolsillos se va el dinero excedentario que recaudan por transportar las bombonas llenas.
Al respecto, el concejal Carlos Taborda expuso que la situación del despacho de gas en la jurisdicción es crítica, ya que en algunos barrios como El Caney les llega gas dos veces al año.
Las empresas de gas que existían en el municipio dejaron de funcionar luego de ser expropiadas al considerarse que prestaban un mal servicio, cuando el gas llegaba cada 20 días y lo repartían cada a casa, señaló Taborda.
Pero ahora la situación en Ureña es peor, ya que a duras penas envían gas dos veces al año y lo venden en pesos colombianos. Además, le niegan la posibilidad a las personas de pagar en bolívares, la moneda nacional, dijo.
Los precios en que venden las bombonas son los siguientes: bombona de 10 kilos en 13.000 pesos colombianos (76,47 bolívares); bombona de 18 kilos en 18.000 pesos colombianos (105,88 bolívares); bombonas de 27 kilos en 27.000 pesos colombianos (158,82 bolívares), y la de 48 kilos en 47.000 pesos colombianos (276,47 bolívares).
Estos precios los manejan con la excusa del pago de la movilización de las bombonas, y las colocan todas en la calle sin medida de seguridad, por lo que el edil solicitó que las bombonas se entreguen casa por casa, tal como lo hacían las empresas privadas.