Adultos mayores venezolanos, cansados de sobrevivir por la caridad de familiares que envían remesas

Adultos mayores venezolanos, cansados de sobrevivir por la caridad de familiares que envían remesas

Adultos mayores están cansados de sobrevivir por la caridad de familiares que envían remesas

 

 

 

 

 

Ser adulto mayor en Venezuela significa vivir sometido a la caridad de las remesas de los familiares residentes en el exterior. “Queremos que mejore el salario mínimo”, es la solicitud de los abuelitos apureños este lunes 29 de mayo, tras la conmemoración de su día.

María Eugenia Díaz // Corresponsalía lapatilla.com

Minerva Ortega, presidenta de la Federación de Trabajadores del estado Apure, durante la concentración de calle realizada en el bulevar de San Fernando, consideró que los adultos mayores conmemoran su día de forma dramática, porque no gozan de pensiones dignas ajustadas al artículo 91 de la Constitución, el cual establece que “todo trabajador o trabajadora tiene derecho a un salario suficiente que le permita vivir con dignidad y cubrir para sí y su familia las necesidades básicas materiales, sociales e intelectuales”.

Ortega avizora que si Nicolás Maduro no decreta un aumento en las pensiones, desaparecerá este beneficio ante el alza indiscriminada del precio del dólar.

Rechazó el otorgamiento de bonos por parte del régimen, en lugar de aumentar el salario mínimo que genera prestaciones sociales. “No nos vamos a cansar, estamos de pie para salir de esta situación”, apuntó.

Elba Hernández, médico internista jubilada del Ipasme en el año 2019 y médico activo en el hospital Pablo Acosta Ortiz (HPAO) en San Fernando, exigió a las autoridades proporcionar calidad de vida a los trabajadores del sector salud y a todos los venezolanos, en aras de cumplir una dieta saludable.

“Los adultos mayores no podemos tener la capacidad económica para la adquisición de alimentos y medicinas. Exijo el mejoramiento del salario en el país. Nadie puede vivir con 130 bolívares, porque un kilo de queso, hecho en Apure, cuesta más de 100 bolívares. Entonces, cómo compramos nuestros alimentos y las medicinas”, apuntó.

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