Un caso de homicidio que se enfrió durante más de 40 años se resolvió con la ayuda de la tecnología de genealogía genética forense, dijo este jueves el fiscal general de New Hampshire, John M. Formella.
Por CNN
Los investigadores analizaron cientos de pistas después de que Laura Kempton, de 23 años, fuera encontrada muerta en su apartamento de Portsmouth en septiembre de 1981 por un oficial de policía que intentaba entregarle una citación judicial, dice un comunicado del fiscal general. Una autopsia reveló que murió por un “trauma masivo” en un lado de la cabeza.
Pero no fue hasta 2022 que los investigadores analizaron muestras de ADN tomadas del cuerpo de Kempton usando genealogía genética, una técnica que compara el ADN no identificado, como el de la escena del crimen, con el ADN en las bases de datos de genealogía para reducir a los sospechosos o identificar a sus familiares.
Esa prueba, además de una mayor investigación y pruebas de ADN en 2023, ayudó a los investigadores a concluir que Ronney James Lee fue responsable de la muerte de Kempton, según el comunicado.
Lee murió en 2005 a los 45 años debido a una intoxicación aguda por cocaína. Tenía 21 años cuando mataron a Kempton, dijo el fiscal general.
Si Lee todavía estuviera vivo, las autoridades habrían presentado cargos de asesinato en primer grado en su contra, dijo Formella.
Las muestras de ADN que ayudaron a vincular a Lee con el caso se encontraron en el cuerpo de Kempton, una funda de almohada y una colilla de cigarrillo en el lugar, según un informe de investigación del fiscal general.
Cuando una muestra de ADN de la escena del crimen se cargó en una base de datos de genealogía genética pública en 2022, los investigadores identificaron a una persona en esa base de datos que era pariente de quien tenía ese ADN, se lee en el informe.
Lea más en CNN