El nivel máximo de alerta por calor en Francia se extiende este miércoles a más de una quinta parte de su territorio, con la previsión de temperaturas superiores a los 40 grados y la posibilidad de récords en amplias zonas del sur del país.
Météo France anunció hoy esa ampliación de la alerta roja de 4 a 19 departamentos del centenar que hay en Francia, en una zona que va del valle del Ródano por el este a la región de Toulouse por el oeste y a Montpellier por el sur.
Estarán en alerta naranja, la segunda más grave, otra cuarentena de departamentos, incluidos todos los demás de la mitad sur y los del flanco este, en las fronteras con Italia, Suiza y Alemania.
El pico de esta ola de calor, la más intensa de todo este verano en Francia, se espera entre el martes y el jueves, según las regiones, y eso se traducirá en nuevos récords de máximas, como los que se batieron el lunes en Vinsobres (42,4 grados, departamento de la Drome) o Narbona (39,8).
Los termómetros subieron ayer hasta 41 grados en Carcasona, hasta 40 en Orange, Valence y Albi, 39 en Toulouse, Grenoble y Aix-en-Provence, 38 en Lyon, Agen y Perpiñán, 37 en Angulema, Béziers y Annecy.
De hecho, la de ayer fue a escala nacional para toda Francia la jornada más calurosa después del 15 de agosto desde que empezaron los registros en 1947 de ese índice sintético, con 26,6 grados de media ponderada.
En la noche del lunes al martes, a las 05:00 de la madrugada (03:00 GMT) los termómetros no habían bajado de 29 grados en Niza, de 26 en Marsella y Sète, de 25 en Toulouse y Montauban, de 24 en Cognac y Mâcon o de 23 en Lyon y Clermont Ferrand.
Esta tarde, a las 16:00 locales (14:00 GMT) ya se habían alcanzado los 40 grados en varias ciudades del bajo valle del Ródano como Montélimar, Orange, Aviñón o Nimes, pero también en varios observatorios en las proximidades de Narbona.
La alerta roja significa, más allá de un mensaje de aviso por el riesgo para la salud del conjunto de la población, que los prefectos pueden decidir ajustar o incluso cancelar eventos o actividades, como ya ocurrió hoy en Lyon con las salidas al exterior de centros de menores.
Este dispositivo se creó en 2004 tras la conmoción que generaron las olas del calor del 2003, a las que se atribuye unas 15.000 muertes en el país.
En 2022, la vigilancia roja se activó en 14 departamentos del suroeste durante el mes de junio y en 15 de la fachada atlántica en julio.
EFE