Ingrid Betancourt contó detalles desconocidos de Gustavo Petro y su estado de crisis en Bélgica

Ingrid Betancourt contó detalles desconocidos de Gustavo Petro y su estado de crisis en Bélgica

Ingrid Betancourt y Gustavo Petro

 

Ingrid Betancourt habló con SEMANA. Además, hizo una grave denuncia contra las disidencias y dijo que el hoy presidente es el sepulturero de la paz de Santos.

Por semana.com

SEMANA: ¿Cómo vio la proposición para someter a Gustavo Petro a un examen médico?

INGRID BETANCOURT (I. B.): Es la función del Congreso. Les corresponde a los congresistas velar por asegurarles a los colombianos que la democracia funciona correctamente. Como en una empresa, cuando una persona tiene a cargo grandes responsabilidades, tiene que demostrar que está en las capacidades funcionales, mentales, emocionales, psíquicas, entre otras. La realidad que venimos observando desde hace un año es que en el comportamiento de Gustavo Petro hay acciones erráticas y unas faltas graves como presidente.

SEMANA: Pero la proposición no la firmaron muchos congresistas. ¿Ve buen ambiente en el Congreso?

I. B.: Esto es un tema político. Quienes están con el Gobierno no la firmarán, tampoco quienes le tienen miedo. Más allá de esos intereses inmediatos hay una realidad y es que el presidente tiene que garantizar a los colombianos que está en sano juicio. Los ciudadanos no tenemos dudas frente a su inteligencia, pero sí tiene comportamientos erráticos que hacen pensar que tiene dificultades para manejar su agenda diaria, bien sea por problemas de salud, adicción, emocionales o psiquiátricos. En Colombia, parece que el presidente es el rey y no tiene que rendirle cuentas a nadie y no es así.

SEMANA: Si el Congreso no aprueba la proposición del examen médico, ¿el país se quedará sin saber de fondo el por qué de las ausencias del presidente?

I. B.: Hay otros mecanismos, entre ellos, los legales. Esto lo puede hacer el Congreso, la Corte Suprema de Justicia, el Consejo de Estado. Es una avenida que se está abriendo, es la primera vez que esto trasciende a la luz pública.

SEMANA: Usted dijo, en su momento, que había encontrado al presidente en Bélgica, cuando él era funcionario de la embajada colombiana, con problemas depresivos. ¿Tendrá relación ese tema con las actuales ausencias?

I. B.: No sé si son temas depresivos o de adicción. Uno lo único que hace cuando está al frente de una situación de estas es observar un comportamiento. Uno dice, en pleno día, una persona que tiene que ir a trabajar y que no está laborando, que está acostado, tirado en el suelo, en su apartamento en Bruselas, y uno no sabe por qué, simplemente uno dice, esto no es normal. Y de ahí, uno puede especular: ¿qué le pasó? ¿Estaba depresivo? ¿Tomó mucho licor la noche anterior? El problema es que esto es repetitivo. Ahí es cuando los colombianos tienen derecho a las explicaciones. El Congreso es quien, en primera línea, debe pedir las explicaciones. A final de cuentas, cualquier ciudadano tiene la posibilidad de tutelar este tipo de conductas.

SEMANA: Como el tema es de connotación, ¿puede relatarnos qué fue lo que encontró en el apartamento de Gustavo Petro en Bruselas?

I. B.: Yo no le dije nada, Gustavo Petro no podía actuar con uno, él, simplemente, estaba ido, estirado en el suelo. Yo hablé con su entonces esposa, Mary Luz Herrán, vi a sus niños pequeños, eran muy chiquititos, debían tener tres añitos, ellos corrían por toda la casa porque era una visita privada. Me imagino que para los pequeños era normal, porque saltaban encima del hoy presidente, daban vueltas. La esposa, apenada, diciendo: “Bueno, qué pena con ustedes, los estábamos esperando, pero no ha reaccionado. Vuelvan más tarde”. Y eso fue así. Yo, por eso, creo que el país debe tomar consciencia. Este no es un comportamiento excepcional (…). Para mí fue sorprendente, más no incómodo porque no conocía a Petro, lo iba a conocer y lo encontré en ese estado.

SEMANA: ¿Petro los invita a su apartamento y no los reconoció ese día?

I. B.: No, es que él no estaba consciente, estaba tirado en el suelo de la sala, durmiendo, ido, no sé. No estaba en su cuarto. Si él hubiera estado enfermo, como cuando a uno le da gripa, habría reaccionado y habría dicho alguna cosa, pero estaba fuera de circuito. No reaccionaba.

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