La denuncia la formuló el concejal por Lagunillas, Luis Martínez, quien aseguró que las dos parroquias más grandes de la zona están sumergidas en un problema de salud pública por el colapso de las aguas servidas.
Por Corresponsalía
Martínez dijo además a lapatilla.com que ha transcurrido un mes desde la visita del Ministro Reverol a la planta de tratamiento del municipio y sólo han desmalezado el área.
Las instalaciones están desvalijadas.
“Como doliente del Zulia y sus habitantes, espero que en la mesa de trabajo que impulsa el Gobierno Central para el rescate del Lago de Maracaibo se tome en cuenta la recuperación y refracción de las plantas de tratamiento ya que casi todas en la región están inoperativas. De allí se deriva en gran parte el colapso de la contaminación del Coquivacoa y los botes de aguas negras”, destacó Martínez.
Según la denuncia presentada por el edil, las aguas negras abundan en las calles de la parroquia Alonso de Ojeda y Libertad. Alrededor del 80% de la población padece de enfermedades gastrointestinales y respiratorias por la paralización de la planta de tratamiento.
Martínez, aseguró que a ello se le suma la paralización de las bombas de la F10 en la parroquia Alonso de Ojeda y la J en Tamare. Por ello las aguas negras se desbordan en las calles y casas de la localidad.
Una vez más Martínez hizo un llamado a Hidrolago y al régimen para atender la estación de bombeo.
En cuanto a la actividad económica dijo que está severamente afectada, casi paralizada, producto de la crisis que hay en el país, la principal fuente de empleo del municipio ubicado en la Costa Oriental del Lago del Zulia era en Petróleos de Venezuela, sus condiciones como patrono son deplorables en la actualidad.
El concejal dijo que desde la Cámara Municipal trabajan en organizar y apoyar a los emprendedores con el propósito de impulsar sus actividades y motorizar el aparato económico.
Martínez estima que alrededor del 50% de los habitantes de este municipio petrolero emigraron por la crisis humanitaria y economía que continúa azotando al país.