En un comunicado conjunto, defensores de derechos humanos y la comunidad migrante han denunciado con firmeza las recientes declaraciones del presidente venezolano, Nicolás Maduro, relacionadas con la migración venezolana.
Rechazando enérgicamente las afirmaciones del régimen, el comunicado expone que las cifras oficiales están en desacuerdo con la realidad, ya que se estima que alrededor de 7.7 millones de venezolanos han dejado su país en busca de refugio en el extranjero. Se enfatiza que esta diáspora ha tenido un profundo impacto en la región, equivalente a uno de cada tres venezolanos buscando un lugar seguro fuera de Venezuela.
El comunicado subraya la responsabilidad de destapar estas declaraciones engañosas, que buscan ocultar la verdadera magnitud de la crisis humanitaria causada por el régimen de Maduro. Se rechaza la afirmación de que la migración es resultado de sanciones económicas, en lugar de ser una respuesta a la violación de derechos humanos, la falta de acceso a servicios básicos y la miseria impuesta por el régimen. Además, se menciona que miles de venezolanos continúan huyendo de su país, a menudo arriesgando sus vidas en rutas peligrosas, como la travesía por la selva del Darién.
El comunicado hace hincapié en que la crisis es innegable y que los países de la región reconocen su magnitud al recibir y apoyar a los migrantes venezolanos. Se reitera el compromiso de seguir trabajando en la defensa de los derechos de los migrantes venezolanos y colaborar con la comunidad internacional en busca de soluciones efectivas. En resumen, el comunicado destaca la importancia de no ocultar la realidad de la migración venezolana y llama la atención sobre la necesidad de abordar esta crisis humanitaria sin precedentes.
A continuación presentamos el texto completo del comunicado:
“Como voces unidas en la defensa de los derechos humanos y la comunidad migrante, emitimos este comunicado para denunciar con determinación y firmeza las recientes declaraciones de Nicolás Maduro relacionadas con la migración venezolana. Rechazamos enfáticamente las afirmaciones del régimen venezolano, que sostiene que “solo dos millones de ciudadanos venezolanos han abandonado su país y que la mitad ha retornado”. Las cifras disponibles desmienten estas declaraciones: la Plataforma R4V informa que la cifra real de migrantes venezolanos es asombrosa, alcanzando los 7.7 millones. Este éxodo ha tenido un impacto profundo en toda la región, equivalente a aproximadamente uno de cada tres venezolanos buscando refugio en el extranjero. Es nuestro deber destapar estas declaraciones como un intento del régimen de Maduro de ocultar la verdadera magnitud de la diáspora venezolana y el sufrimiento de nuestros conciudadanos.
No podemos pasar por alto que el régimen de Maduro ha perpetrado persecuciones, asesinatos y torturas contra los venezolanos, dejando tras de sí una estela de migración forzada y sufrimiento. Estas afirmaciones buscan, únicamente, desviar la atención de una crisis humanitaria sin precedentes. La migración venezolana no es el resultado de sanciones económicas, como se intenta presentar, sino una respuesta a un régimen que vulnera los derechos humanos, niega el acceso a servicios y derechos básicos, y somete a una nación a la miseria. Cientos de venezolanos continúan huyendo de Venezuela, poniendo en riesgo sus vidas en rutas peligrosas, incluyendo la peligrosa travesía a través de la selva del Darién.
Los datos estadísticos y los informes de organismos internacionales, como los proporcionados por Panamá, confirman que los venezolanos representan el grupo más numeroso que cruza esta región inhóspita. Esta crisis es innegable, y los países de la región reconocen su magnitud al recibir y brindar apoyo a los migrantes venezolanos. No permitiremos que las declaraciones engañosas del régimen desvíen la atención de la verdadera magnitud de esta crisis y del sufrimiento continuo de nuestra población.
No podemos pasar por alto las historias de miles de refugiados, desplazados y migrantes venezolanos que han abandonado sus hogares en busca de una mejor calidad de vida, seguridad y estabilidad en otros países. Reiteramos nuestro compromiso de seguir trabajando incansablemente en la defensa de los derechos de los migrantes venezolanos y colaborando activamente con la comunidad internacional para encontrar soluciones efectivas. No es ético ni humano ocultar la realidad: cerca de 8 millones de venezolanos están desplazados y migrantes en la región, víctimas de un régimen que ha vulnerado sus derechos y bienestar.”