El Instituto de Educación Especial Falcón, ubicado en la avenida Alí Primera de Coro, capital del estado Falcón, ha sido víctima de innumerables hurtos que lo han dejado hasta sin pupitres.
Por Irene Revilla / Corresponsalía lapatilla.com
Este martes 7 de noviembre, los padres y representantes decidieron salir a protestar en la transcurrida avenida donde se ubica la institución que, además, está rodeada de las sedes de la Policía de Falcón, Guardia Nacional, Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, entre otras delegaciones de investigaciones, pero ni ese beneficio la ha alejado de los hurtos que acabaron con la escuela.
Los representantes detallaron que la escuela comenzó a presentar graves fallas, cuando llegaron los connacionales durante la pandemia por la covid-19 y la institución la usaron como refugio. Posteriormente, se incrementaron los hurtos en las horas nocturnas, al punto que ya los estudiantes no tienen ni dónde sentarse.
Lo último que se llevaron fue el enfriador, las extensiones del cable que habían hecho, una poceta, un lavamanos y el material didáctico con el que trabajan los niños. La escuela había quedado sin luz, porque se habían llevado hasta los cables, pero con autogestión de las maestras lograron poner una extensión para que algunas áreas tuvieran luz.
En la escuela tampoco hay ventanas ni puertas, situación que preocupa a las maestras, porque trabajan con niños con retardo, síndrome de Down y autistas, que pueden salir corriendo en cualquier momento y poner en riesgo su seguridad.
De la escuela se llevaron todo, incluso, sillas y mesas. En la mayoría de los casos, las maestras deben acudir a otros salones para buscar sillas, y si van al baño no tienen ni dónde almacenar el agua.
Las condiciones de esta institución son pésimas y aunque han hecho el llamado a las instituciones gubernamentales, el caso no ha sido tomado en cuenta. Al contrario, desde la dirección las docentes han recibido amenazas si dan declaraciones a la prensa. Por ello, los representantes tomaron la batuta al frente de la protesta.
Al lugar llegaron funcionarios de todos los cuerpos policiales para mediar con los protestantes y evitar que pararan el tráfico en la importante vía, pero esta acción es la única solución que tuvieron a manos para ser escuchados y que se cumpla uno de los tantos compromisos que se hizo a nivel regional y municipal para mejorar la calidad de la educación de los niños y de sus docentes.