El Indicador Mensual de Actividad Económica (IMAE) del Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF) refleja en los primeros nueve meses de 2023 una contracción del 2,4% respecto al mismo período del año anterior. Esto revierte la expansión del 14,8% observada en Venezuela en 2022.
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No obstante, en el tercer trimestre la economía logró salir de la recesión al crecer 2,4%.
Los principales componentes, como la producción petrolera, el crédito y gasto fiscal, mostraron una considerable mejoría.
Solo la recaudación del IVA, usada como proxy del consumo privado, experimentó ligera caída.
El gasto fiscal impulsado por la cuenta de la Tesorería y el repunte de salarios privados contrastan con la contracción salarial pública.
El futuro dependerá de la sostenibilidad petrolera, dado al alivio de sanciones de EEUU.
Si bien 2023 presenta una leve contracción tras la recuperación de 2022, el tercer trimestre evidencia que la economía venezolana logra estabilizarse e iniciar una senda de crecimiento apoyada en la flexibilización internacional y el gasto interno.
