La primer ministro de Aruba, Evelyn Wever-Croes, informó este viernes que se comunicó con el régimen de Nicolás Maduro para coordinar acciones, tres días después de que autoridades arubeñas hallaran cuatro cadáveres sin identificar tras el naufragio de un barco con migrantes.
“Debemos seguir investigando a fondo y estamos en comunicación con las autoridades venezolanas para que también asuman la responsabilidad en este tipo de situaciones”, dijo Wever-Croes en una conferencia de prensa en la que dio sus condolencias a los familiares de los fallecidos.
“He tomado contacto con el consultado de Venezuela en Aruba, he tomado contacto con la embajada del Reino de los Países Bajos en Caracas, para que así podamos expresar nuestros mensajes de condolencia y de convivencia con los seres queridos de estas víctimas”, agregó.
Lito Lacle, el vocero de la policía arubeña, confirmó el martes las cuatro muertes, mientras que la prensa local reportó que la embarcación que naufragó provenía de Venezuela, al sur de la isla.
La Guardia Costera informó el lunes que dos personas llegaron a Vader Piet, en el norte de la isla, en una pequeña embarcación para pedir ayuda, luego que un “barco con un grupo de inmigrantes indocumentados se había volcado en el mar”, según un comunicado.
Aruba es un destino atractivo para muchos venezolanos, sobre todo habitantes del estado Falcón (norte), a unos 90 km de la isla. En los últimos meses varias embarcaciones con migrantes han llegado a Aruba, que exige visa a los venezolanos desde 2020.
“Hemos visto muchas víctimas haciendo este trayecto de la misma forma en la que tuvimos este lamentable hecho esta semana”, alertó Wever-Croes, quien llamó a los migrantes a pensarlo “dos veces” antes de emprender “este peligroso trayecto”.
Se estima que unos 17.000 venezolanos viven en Aruba.
Forman parte de unos 7 millones que salieron del país, huyendo de una aguda crisis.
La Guardia Costera de Aruba detuvo en octubre a unos 66 migrantes venezolanos que trataban de ingresar al país.
Con información de AFP