El encarcelado líder opositor ruso Alexéi Navalni reapareció para calmar las preocupaciones sobre su paradero.
En sus primeras palabras desde la prisión de la remota localidad siberiana de Jarp, dentro del Círculo Polar Ártico, aseguró encontrarse “bien”.
Navalni reveló haber arribado el sábado tras un agotador viaje de 20 días con escalas. Agredeció el apoyo recibido, pues sus abogados no sabían de él desde el 5 de diciembre.
Desde su celda, describe pasar de la noche al atardecer y viceversa, al estar la prisión nombrada “Lobo Polar” en plena taiga ártica.
Su traslado responde a una nueva condena de 19 años, en medio de su campaña contra la reelección de Putin en 2024. Jarp dista 2.000 km de Moscú y la cárcel alberga a los convictos más peligrosos, siendo prácticamente imposible la fuga.
Su reaparición busca calmar la preocupación internacional, aunque continúa incomunicado en una de las prisiones más remotas de Rusia, donde expertos advierten el aislamiento podría agravarse.
Con información de EFE