Los dirigentes de la Unión Europea (UE) superaron este jueves las reticencias de Hungría y acordaron un paquete de ayuda financiera a Ucrania por 50.000 millones de euros (USD 54.300 millones), considerado un “mensaje fuerte” al presidente de Rusia, Vladimir Putin.
“Estos 50.000 millones de euros por cuatro años envían un mensaje muy fuerte a Putin, justo antes del segundo aniversario de su brutal invasión” del territorio de Ucrania, dijo al cierre de una cumbre en Bruselas la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen.
El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, apuntó que el acuerdo “asegura una financiación firme, predecible y a largo plazo para Ucrania”, confrontada a una invasión rusa desde el 24 de febrero de 2022.
“Es muy importante que la decisión haya sido tomada por los 27 líderes, lo que demuestra una vez más la sólida unidad de la UE”, se felicitó rápidamente el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski.
Zelenski agradeció al bloque y dijo que ve en la ayuda “una señal clara” enviada a Rusia. “Hoy la UE tomó una decisión esperada desde hace tiempo”, dijo el mandatario ucraniano en su alocución diaria. “Se trata de un mensaje claro a Rusia, Europa resistirá”, añadió.
El presidente francés, Emmanuel Macron, señaló que Rusia no debe contar con una “fatiga” de la UE con relación al apoyo a Ucrania.
Para el jefe del gobierno de España, Pedro Sánchez, el entendimiento “demuestra que en los momentos claves la UE es capaz de alcanzar acuerdos y estar a la altura de las circunstancias”.
El enorme paquete de ayuda está constituido por 33.000 millones de euros en préstamos de largo plazo y unos 17.000 millones en garantías inmediatas y transferencias no reembolsables, durante un plazo de cuatro años, hasta 2027.
El acuerdo alcanzado incluye la edición anual de un informe de la Comisión Europea sobre la utilización de los fondos.
Los dirigentes también discutieron la entrega de ayuda militar a Ucrania, en especial la entrega de municiones de mortero y obús.
En marzo de 2023, la UE se había comprometido a entregar a Ucrania, hasta el fin de marzo de este año, un millón de obuses, pero el miércoles el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, admitió que apenas se entregará en plazo alrededor del 52% de lo prometido.
La ofensiva rusa se centra en el este de Ucrania, que en los últimos meses bombardeó infraestructuras petroleras y gasísticas en el territorio ruso.
La central nuclear ucraniana de Zaporiyia, ocupada por Rusia, vedó este jueves el acceso a sus instalaciones al personal del operador ucraniano Energoatom, informó el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).
Además, durante la cumbre, los dirigentes de la UE abordaron rápidamente la situación en Medio Oriente, en especial las tensiones en el mar Rojo y la dramática situación humanitaria en la Franja de Gaza, confrontada desde hace casi cuatro meses a una ofensiva israelí contra el movimiento islamista Hamás.
El bloqueo húngaro
Hungría exigía una revisión anual de la ayuda, pero los otros 26 países del bloque querían evitar darle a Budapest la posibilidad de interponer su veto cada año.
El primer ministro húngaro, Viktor Orban, usó su veto al paquete de ayuda a Ucrania para obtener a cambio el desembolso de los fondos europeos que le corresponden a su país y que la UE había bloqueado por dudas sobre la vigencia del Estado de Derecho en ese país centroeuropeo.
Orban había bloqueado el acuerdo en diciembre. La UE había desbloqueado previamente 10.000 millones de euros para Hungría, pero eso no bastó para lograr su apoyo al paquete de ayuda.
En su cuenta en Facebook, Orban aseguró este jueves que el dinero que la UE le debe a su país y que mantiene congelado no será enviado a Ucrania.
“Temíamos que los fondos debidos a los húngaros y actualmente congelados por la Comisión Europea terminen en Ucrania”, dijo, destacando que recibió “garantías” de que eso no ocurrirá.
Un millar de tractores
La cumbre de la UE arrancó bajo la presión de una enorme manifestación de agricultores belgas, que bloquearon desde la madrugada las principales avenidas de Bruselas con un millar de tractores y máquinas agrícolas.
La policía los mantuvo alejados de la sede de la cumbre, aunque los manifestantes prendieron fuego a neumáticos y los arrojaron a la policía en una plaza próxima del Parlamento Europeo.
Las manifestaciones de productores agropecuarios se multiplicaron en las últimas semanas en varios países de la UE, con epicentro en Francia, donde los principales sindicatos del sector llamaron a levantar los bloqueos de carreteras, tras obtener satisfacción de muchas de sus reivindicaciones. AFP