Los tribunales venezolanos ordenaron la encarcelación de la activista Rocío San Miguel mediante una audiencia judicial.
San Miguel, presidenta de la ONG Control Ciudadano, fue detenida la semana pasada bajo supuesta vinculación con un complot de magnicidio contra Nicolás Maduro.
Sus abogados confirmaron que permanecerá recluida en la sede del servicio de inteligencia (Sebin) en El Helicoide, en Caracas.
También dictaron prisión para su expareja Alejandro González en la sede de contrainteligencia militar (Dgcim).
Los familiares de San Miguel, detenidos inicialmente, recibieron prohibición de salir del país.
El fiscal general Tarek William Saab ratificó la acusación contra San Miguel por traición, conspiración y terrorismo. Aseguró su implicación en la trama denominada “brazalete blanco” cuyo objetivo era atentar contra Maduro.
ONG nacionales e internacionales han expresado preocupación por la detención y exigen respeto a los derechos de la activista.
Con información de EFE