La ministra del Interior de Chile, Carolina Tohá, no descartó este miércoles la huida del país de dos sospechosos en el secuestro y homicidio del exmilitar venezolano Ronald Ojeda en Santiago y confirmó la solicitud a Interpol de órdenes de búsqueda internacional.
“Las Policías han cursado órdenes de Interpol de búsqueda de personas que son sospechosas de haber participado en este delito”, dijo la secretaria de Estado en un punto de prensa.
La Justicia chilena inició el lunes bajo total hermetismo la audiencia de imputación contra un venezolano de 17 años por su presunta responsabilidad en el crimen de Ojeda, cuyos restos fueron encontrados en una comuna del sur de Santiago la semana pasada.
El fiscal a cargo de la indagatoria, Héctor Barros, informó el lunes que se identificó a otros dos sospechosos y vinculó a la banda criminal Tren de Aragua, nacida en una cárcel venezolana y extendida por Chile, Perú y Bolivia, con el crimen de Ojeda.
Según la primera versión basada en especulaciones, grabaciones de cámaras y el hallazgo de un automóvil con uniformes falsos, Ojeda habría sido sacado en plena noche de su casa el 21 de febrero, casi desnudo, por un grupo de personas vestidas con uniformes de la Policía y conducido hacia un lugar desconocido.
Desde ciertos sectores de la oposición se apuntó a una supuesta operación encubierta de los servicios secretos venezolanos, que se habrían infiltrado en el país y se habrían llevado a Ojeda de regreso a su país, una versión que fue desestimada por el chavismo.
Tohá reiteró este miércoles el carácter secreto de la investigación y señaló que la legislación vigente impide filtrar información de cualquier tipo vinculada al caos.
“Cada vez que llega una información impropia a los medios de comunicación es porque alguien que tuvo acceso a la carpeta incumplió su deber, violó la ley e hizo la filtración. Lo que hay detrás de una filtración es grave, es un delito y lo vamos a perseguir”, afirmó la ministra.
EFE