Uno de los grandes atractivos para los turistas que visitan el Reino Unido es el Palacio de Buckingham por la historia que representa y su arquitectura, ideal para tener los mejores recuerdos. Sin embargo, a su alrededor hay una serie de carteles que advierten la peligrosidad de acercarse demasiado a los caballos de la Guardia Real y los jinetes de la Corona. Pese a las advertencias, muchos visitantes no hacen caso y cruzan los límites de lo permitido. Incluso, muchos se llevan una gran sorpresa al ver la reacción de los guardias que se toman muy en serio su trabajo.
Por: La Nación
Las redes sociales se convirtieron en un canal de comunicación donde muchas veces se viralizan situaciones de este tipo. En esta ocasión, un grupo de turistas transgredió las normas que están expresadas en los carteles del palacio y se llevaron una feroz respuesta.
La Guardia Real mantiene su seriedad y posición durante largas horas en su turno de vigilancia, algo parecido a lo que sucede con los Granaderos a Caballo en nuestro país, quienes custodian el mausoleo del general José de San Martín en la Catedral Metropolitana. En el caso de los británicos, muchos turistas quieren ridiculizar a los guardias que están quietos como estatuas y no reaccionan, salvo si alguna persona infringe una de las normas.
En esta oportunidad, un grupo de turistas se acercó a la posición de uno de los guardias reales para intentar que se moviera o dijera algo. Cabe aclarar que, en su turno de vigilancia, no se mueven en absoluto… hasta que deben hacerlo.
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