El candidato unitario, Edmundo González, destacó este jueves en entrevista con VPI tv que aspira a ser el candidato de la conciliación, al tiempo que alertó que su rival, Nicolás Maduro, “no tiene límites y a veces tampoco escrúpulos”.
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“Llamé a Manuel Rosales al día siguiente de la designación para darle las gracias por su desprendimiento y haber apoyado mi candidatura y de haber sido él quien la presentó y pidió la unanimidad. Se puso a la orden para la campaña. Hay una unidad real y absoluta”, certificó González en diálogo con el periodista Isnardo Bravo durante el programa “Qué propone”.
“El 28 de julio tendremos las elecciones y se abre un periodo de transición y estaremos todos los partidos y grupos que conforman la PUD. (…) Nuestro compromiso es por la reconstrucción de la institucionalidad democrática en Venezuela, para que el adversario político sea visto como adversario y no como enemigo. Llegué para que no se propicie más la diatriba política de la confrontación, todo eso debe darse por superado”, aseveró.
González incluso se dio tiempo para bromear sobre su inesperada postulación: “Yo fui candidato tapa y frasco al mismo tiempo (…) preservar la tarjeta de la MUD fue el propósito fundamental de asumir esa responsabilidad”.
Su primera acción al ganar la presidencia “sería llamar a la reconciliación de todos los venezolanos. Iniciando un periodo de transición, de apertura y diálogo con todas las fuerzas del país. Incluyendo a quienes hoy están en el gobierno. Aquí la necesidad es entenderse, supera la confrontación y vernos como venezolanos”
Según el criterio de González, “las adhesiones fueron producto de negociaciones que se están dando. (…) se va a hacer un proceso electoral que confiamos será transparente y habrá un ganador, confiamos que sea el candidato de la unidad”.
Pese a su optimismo, advirtió que “estamos ante un adversario que no tiene límites y a veces tampoco escrúpulos. Estoy claro sobre lo que estoy asumiendo. Uno tiene varios días en esto”