Esta semana, el Palacio de Buckingham develó el primer retrato oficial de Carlos III. La pintura recibió críticas mixtas y muchas dudas sobre los simbolismos.
Por BiobioChile
El cuadro, que es de 2,6 por 2 metros y que fue pintado por el artista británico Jonathan Yeo, llamó la atención en todo el mundo por sus particularidades. Para empezar, casi la totalidad de la obra es de un intenso color rojo.
Esta decisión de color generó comentarios negativos que calificaron la pintura como “baño de sangre”. Otros apuntaron que parecía que estuviera en el infierno.
Sin embargo, la escasa variedad paleta de colores tendría una explicación según el autor de la obra, así como otros elementos que la componen.
Según consigna WWD, la pintura fue encargada en 2020 por la organización benéfica Worshipful Company of Drapers, cuya sede, el Draper’s Hall en Londres, será el sitio donde quedará instalada la obra.
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