Italia ha confiscado un jet privado a un empresario ruso, acusado de fraude fiscal y aduanero, además de alertar a las autoridades alemanas de la existencia de al menos otros tres aviones en el aeropuerto de Karlsruhe-Baden-Baden utilizados para evadir el pago de tasas, informó este jueves la policía italiana.
Agentes de la Guardia de Finanzas (policía financiera) de Savona (norte) y personal de la Oficina Antifraude de la Agencia de Aduanas y Monopolios ejecutaron el secuestro preventivo del avión de lujo en un hangar del aeropuerto de Villanova d’Albenga, explicó la fuente en un comunicado.
El jet, un Cessna Citation X con bandera estadounidense, había permanecido en ese hangar durante más de seis meses y, por lo tanto, mucho más allá del plazo máximo previsto para el régimen de admisión temporal, sin haber pagado el IVA y las tasas aduaneras correspondientes.
Las investigaciones permitieron rastrear el avión y determinar que estaba formalmente registrado como propiedad de un fondo con sede en Delaware (EE. UU. ), a cargo del empresario ruso, residente en el Principado de Mónaco, que, para ocultar que el jet era suyo y obtener ventajas fiscales, había interpuesto un recurso contra el fondo y otras tres sociedades fiduciarias con sede en las Islas Vírgenes Británicas, las Islas Caimán y Panamá.
La Fiscalía de Savona ha imputado al empresario y otras dos personas cómplices “y obtuvo el embargo de la aeronave cuyo valor, a reserva de una posterior cuantificación que se llevará a cabo con la ayuda de técnicos especialmente experimentados, se indicó prudencialmente en 10 millones de euros, con la consiguiente evasión del IVA de un importe no inferior a 2, 2 millones de euros“.
Los tres acusados pueden ser sentenciados a entre 3 y 5 años de cárcel y a pagar una multa de entre dos y diez veces la suma evadida al fisco.
En el curso de las operaciones, se comprobó “la situación fiscal del empresario con respecto a otros aviones utilizados por él, blindados con las mismas modalidades que el jet encontrado en Italia y con las mismas finalidades de evasión fiscal”.
Por ello, la Fiscalía inició el procedimiento para denunciar, a través de Eurojust, otros vehículos aéreos, entre ellos un avión Gulfstream G650, un Gulfstream GV y un helicóptero Agusta Westland 109S Grand, localizados en Alemania en el aeropuerto de Karlsruhe-Baden-Baden, con un valor estimado de unos 80 millones de euros, con vistas a la posterior impugnación por la evasión del IVA de importación. EFE