En un mundo peligroso, la vieja y cómoda Europa se encuentra en una situación alarmante. En Ucrania prosigue la guerra más sangrienta del continente desde 1945, mientras Rusia representa una amenaza desde el Báltico hasta el ciberespacio. Si Donald Trump vuelve a la Casa Blanca, podría socavar la OTAN, base de la seguridad europea. La economía del continente es vulnerable a las sacudidas causadas por la política industrial y el proteccionismo en otros lugares. Los populistas euroescépticos van viento en popa en las encuestas.
Para hacer frente a estos peligros, Europa necesita, como mínimo, un liderazgo coherente a escala de la UE. También necesita mantener a los extremistas fuera del poder. Que lo consiga depende en parte de la elección de tres mujeres: Ursula von der Leyen, Presidenta de la Comisión Europea, Giorgia Meloni, Primera Ministra italiana, y Marine Le Pen, la principal populista francesa.
Empecemos por la Sra. von der Leyen, que dirige el brazo ejecutivo de la UE desde 2019 y se presenta a un segundo mandato. Se lo merece. Ha hecho un buen trabajo: organizando la enérgica respuesta colectiva de la UE a la agresión de Vladimir Putin y ayudando a profundizar la integración europea en un momento crucial, por ejemplo impulsando un programa pionero para emitir deuda común. Como conservadora alemana de cabeza fría, también ha situado a la Comisión Europea en el centro de la toma de decisiones cuando las relaciones franco-alemanas han sido espinosas. Dadas las amenazas, la necesidad de un liderazgo fuerte y unificado nunca ha sido mayor.
Para lograr un segundo mandato, primero necesita el apoyo de los 27 líderes nacionales de la UE. Luego debe obtener la mayoría en el Parlamento Europeo, que celebra elecciones del 6 al 9 de junio, con más de 350 millones de ciudadanos con derecho a voto. En teoría, contará con el apoyo de los grupos conservadores, liberales y socialistas que forman el establishment político. Pero como la política está tan fragmentada, se prevé que estas tres formaciones obtengan una escasa mayoría de escaños y que algunos de sus diputados rompan filas. La Sra. von der Leyen apenas superó su primera votación, en 2019. Esta vez la victoria no está asegurada.
Eso nos lleva a la señora Meloni, primera ministra de Italia desde 2022 y líder del partido de extrema derecha Hermanos de Italia, que ha pasado de ser una fuerza insurgente a dirigir el país. Se espera que obtenga buenos resultados en las elecciones europeas. Con su apoyo, la Sra. von der Leyen podría tener más posibilidades de obtener una mayoría parlamentaria para un segundo mandato al frente de la UE. Ha estado muy ocupada cortejando a los italianos. “He trabajado muy bien con Giorgia Meloni”, declaró el 23 de mayo.
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