Esta infraestructura clave ha sido testigo de la evolución económica del país desde la época colonial, desempeñando un papel crucial en el desarrollo de la economía venezolana.
Corresponsalía lapatilla.com
Para comprender mejor la situación actual del puerto, nuestro equipo de Corresponsalía en Vargas entrevistó a Cipriana Ramos, vicepresidenta de la Cámara de Comercio del estado Vargas, y a Rúsvel Gutiérrez, presidente de la Cámara de Comerciantes, Industriales y Aduaneros del Estado Vargas.
Importancia histórica del puerto
Cipriana Ramos destaca la relevancia histórica del puerto. “Es uno de los principales puertos del país. Desde la época colonial, la Casa Guipuzcoana ha sido protagonista del comercio internacional facilitando importaciones y exportaciones”.
“Nos hemos consolidado contribuyendo al desarrollo económico del país”, resaltó Ramos.
Este puerto ha sido esencial también para la economía del estado Vargas, actuando como un punto de entrada y salida para una variedad de mercancías.
Por su parte, Rúsvel Gutiérrez añade que el puerto de La Guaira es un referente económico para el comercio internacional. Ha sido la principal entrada al país por su cercanía a Caracas, capital de la república.
Desde la época colonial, el puerto era donde se establecía un control en la entrada y salida de personas y productos entre España y Venezuela para el año 1800. “De allí, eventos importantísimos de llegadas vía marítima de personalidades como lo fue Francisco de Miranda”, detalló Gutiérrez.
Estado actual del puerto
La infraestructura del puerto ha experimentado cambios significativos, pero no todos han sido positivos. Ramos señala que el puerto tiene una capacidad considerable y está equipado con tecnología avanzada. “El puerto de La Guaira tiene capacidad para 1.200.000 TEUs (Twenty-Foot Equivalent Unit, una unidad de medida utilizada en el comercio exterior y en los envíos internacionales), dotado con grúas pórticas y tecnología para mejorar la eficiencia en el manejo de contenedores. Posee un terminal turístico a la espera de buques que dinamicen la economía del estado y de la zona metropolitana de Caracas”.
Sin embargo, también menciona los problemas operativos. “Retrasa la salida de importaciones y el ingreso de exportaciones y vacíos, porque cuenta con un solo equipo de escaneo”.
Gutiérrez describe problemas específicos que afectan la operatividad del puerto. “El puerto de La Guaira se contrae en momentos de alta operación portuaria en la entrada y salida de camiones por no contar con diversas salidas bajo control de personas y vehículos. Esto origina congestionamiento vehicular en toda la zona cuando hay alza de importación y exportación. Un vehículo puede permanecer hasta un día para salir del puerto por la congestión”.
Impacto del chavismo en la operatividad
Ambos entrevistados coinciden en que la gestión del chavismo ha tenido un impacto notable en el puerto.
Ramos menciona que la modernización del puerto de La Guaira con la construcción del nuevo terminal de contenedores ocurrió entre 2010 y 2015 por la empresa Teixeira y Duarte como plan estratégico para revitalizar la infraestructura portuaria. Sin embargo, los beneficios de esta modernización se ven eclipsados por problemas persistentes y falta de mantenimiento adecuado.
Gutiérrez apunta a una inversión significativa, pero con resultados mixtos. “La construcción de los tres muelles de agua profunda con un costo de 450 millones de euros tuvo a bien establecer una terminal de descarga inmediata con seis grúas de nueva tecnología. Esto, en gran medida, da respuesta a una posibilidad de empuje económico del país en condiciones de alta importación y exportación”. No obstante, los problemas estructurales y operativos persisten.
Consecuencias en el comercio
El deterioro del puerto ha tenido un efecto adverso en las actividades comerciales, tanto a nivel estatal como nacional.
Ramos destaca la urgencia de mejoras en la infraestructura. “Urge la instalación de un equipo de escaneo para las exportaciones y organizar el ingreso de vacíos. Esta semana recibimos la queja de algunos transportistas por la demora en salir cuando hay embarques con muchos contenedores y en tiempos de bajo movimiento”.
Gutiérrez añade que los problemas van más allá de la operatividad diaria. “Tener los silos de almacenamiento sin funcionamiento por más de 30 años ha alejado a Vargas de ser un puerto seguro para la carga y descarga de granel. Cuando un buque con 34 mil toneladas debe estar para su descarga en puerto hasta 15 días, por cuanto los silos no están en funcionamiento para la succión y descarga del buque, teniendo estos equipos funcionando, pasaríamos a dar respuesta de 15 días a 3 días para la descarga por cada buque y eso repercute en los costos operacionales del producto importado y del fletamento marítimo”.
Declive en cifras
Según destacó Gutiérrez, el movimiento de importaciones y exportaciones expresadas en dólares para el año 1999 fue así:
– Las importaciones se estimaron en 13.500 millones de dólares
– Las exportaciones de productos no tradicionales se situaron en 2.400 dólares
Con relación al primer semestre del año 2024:
– Las importaciones se ubicaron en 4.900 dólares
– Las exportaciones de productos no tradicionales estuvieron por el orden de 1.374 dólares
“En relación a la aduana, tenemos que Vargas ha perdido su bandera de primer puerto y aduana a nivel nacional, desplazado por Puerto Cabello desde hace más de 10 años y, a su vez, por la aduana de San Antonio del Táchira, que es la segunda aduana o puerto seco de importancia en Venezuela, siendo desplazadas las aduanas de Maiquetía y La Guaira a tercera aduanas del país”, lamentó Gutiérrez.
Principales quejas
Las denuncias y problemas reportados por los comerciantes e industriales reflejan una combinación de frustraciones por la falta de modernización y la ineficiencia operativa.
Ramos explica que el puerto de La Guaira fue construido para operar con la modernización de las aduanas que instaló Sidunea (Sistema Aduanero Automatizado, software diseñado para cubrir todos los aspectos de la gestión aduanera) en el año 2003.
Según detalla, esa aplicación mejoró significativamente los procesos aduaneros, mejorando los tiempos. Indicadores de gestión de la época reportaron despachos en dos horas.
“Había tres canales de selectividad (verde, amarillo y rojo) que permitían disminuir los reconocimientos físicos y la entrega de documentos”, dijo.
Gutiérrez, por su parte, resalta el deterioro de la infraestructura y su impacto negativo. “Hay 24 muelles abandonados y sin mantenimiento para tenerlo en óptima condición y recibir buques de bajo calado. Y prestar servicios generales para un futuro cuando teníamos hasta 50 buques en la rada esperando atracar en puerto. Almacenes, cuyas infraestructuras deben ser revisadas y evaluadas para su óptimo funcionamiento y continuidad operativa para las mercancías que deben ingresar o exportar en condiciones sueltas o a desconsolidar o consolidar, bien sea en importación o exportación”.
La conversación con ambos profesionales del comercio en Vargas revela que el puerto de La Guaira, a pesar de su modernización parcial y su importancia histórica, enfrenta serios desafíos operativos y estructurales bajo la administración chavista.
Las voces de Cipriana Ramos y Rúsvel Gutiérrez resaltan la necesidad urgente de mejoras en la infraestructura y la operatividad del puerto para recuperar su papel crucial en la economía venezolana y asegurar su futuro como un hub logístico internacional eficiente y confiable.