Desde las primeras imágenes de su tráiler, la serie Terminator Zero parece querer subvertir las predicciones. “No es lo que piensas”, dice en efecto un cyborg de aspecto femenino que ha retrocedido en el tiempo, mientras en la pantalla se ve una serie de víctimas (¿de un nuevo prototipo?), pero también bombas atómicas y otros cyborgs asesinos en masa… por si acaso.
Por GQ
Los miedos, absolutamente contemporáneos y elegantemente escenificados, a la bomba atómica y la inteligencia artificial ciertamente relegan este producto al blasonado subgénero de la ciencia ficción social.
El tráiler de Terminator Zero
El estilo y la fotografía de este esperado anime recuerdan mucho a la película japonesa Ghost in the shell. Y no es casualidad, porque ambas son obra del estudio de animación Production I.G. La calidad de la animación de Terminator Zero es palpable, como ya se puede apreciar en el cortísimo metraje ofrecido en YouTube que dura menos de minuto y medio, pero que tiene varios momentos memorables, todos ellos jugando con la tensión ante un destino aparentemente sellado. En resumen, hay muy buenas premisas para ofrecer al público un anime con todas las de la ley, un producto que puede atraer a nuevos fans mientras respeta absolutamente a los históricos.
¿De qué trata Terminator Zero?
Terminator Zero se espera para el 29 de agosto, el día en que las máquinas lanzaron las bombas responsables del apocalipsis nuclear en el centro de Terminator 2 —una de las mejores secuelas de todos los tiempos—, aquel “día del juicio final” que, tal y como advierte el tráiler animado, “llega para todos”. En el segundo episodio de la serie en celuloide, las explosiones atómicas tuvieron lugar en 1997, un año que también resulta fundamental para Terminator Zero, aunque desarrollado en una línea temporal diferente a las demás de la saga, llena de viejos amigos, nuevos amigos y enemigos… y de sangre.
Según las primeras imágenes, los años 1997 y 2022 parecen ser los puntos más importantes de esta línea. La Terminator enviada al pasado para proteger al científico que más tarde construirá Kokoro —una IA japonesa antídoto de Skynet— ha elegido el antepenúltimo año del siglo XX para comenzar su misión.
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