El Servicio Secreto de Estados Unidos aprobó un plan para incrementar la seguridad del exmandatario y candidato republicano Donald Trump (2017-2021) que incluye el uso de pantallas de vidrio blindadas en sus mítines, indicó este jueves el diario The Washington Post.
Normalmente, esas láminas a prueba de balas solo se proporcionan a los presidentes y vicepresidentes cuando se considera necesario en apariciones al aire libre.
El magnate neoyorquino resultó herido en la oreja después de que un joven le disparara el pasado 13 de julio en un mitin en Butler (Pensilvania). El agresor se encontraba en un tejado de fuera del recinto y antes de ser abatido por las fuerzas del orden mató a una persona del público e hirió a otra.
La entonces directora del Servicio Secreto estadounidense, Kimberly Cheatle, acabó dimitiendo diez días después por los errores en la seguridad en ese encuentro y después de haber afirmado que ese intento de asesinato supuso el “mayor fallo operativo” de la agencia “en décadas”.
Trump no ha aparecido en un acto electoral al aire libre desde ese día.
The Washington Post añadió que el Servicio Secreto también agregará a su dispositivo de seguridad otros recursos que normalmente no se contemplan para los candidatos presidenciales. Su fuente del Servicio Secreto no entró en detalles, pero según el diario esas medidas podrían incluir el uso de drones.
La cadena ABC News añadió que no está claro a partir de cuándo entrará en vigor el nuevo despliegue.
Trump ha celebrado mítines en recintos cerrados desde su tentativa de asesinato, pero ha admitido públicamente su deseo de volver a tener actos al aire libre.
“Preferirían que estuviéramos en un estadio, pero no vamos a renunciar a los eventos al aire libre. Toda esa gente a la que tuvimos que rechazar hoy habría podido estar en un acto al aire libre”, dijo el pasado 31 de junio en un mitin en Harrisburg (Pensilvania). EFE