Terremotos en California: la advertencia de una sismóloga ante la creciente actividad en el sur del estado

Terremotos en California: la advertencia de una sismóloga ante la creciente actividad en el sur del estado

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En lo que va de 2024, 13 terremotos de magnitud 4 o superiores azotaron a California, que no experimentaba una actividad sísmica de estas características hace décadas. Sin ir más lejos, desde 2000, el promedio es de cinco temblores ese calibre al año. Tan solo en la primera quincena de agosto se produjeron dos y los expertos sostienen que serán más frecuentes en el futuro cercano.

Por La Nación





El pasado 7 de agosto, un temblor de magnitud 5,2 azotó el sur de California. El fenómeno se produjo durante la madrugada, a las 1.09, a 23 kilómetros de Lamont, al suroeste de Bakersfield. No obstante, las ciudades de Fresno, Reedley, Lindsay, Santa Bárbara y Los Ángeles también lo sintieron en mayor o menor medida. Además, trajo aparejado más de 50 réplicas.

Tan solo cinco días después, el lunes 12 de agosto, otro terremoto sacudió el área de Los Ángeles, esta vez de magnitud 4,4. Tuvo su epicentro cerca del barrio Highland Park y se desarrolló a lo largo del sistema de fallas de empuje de Puente Hill. En este contexto, los expertos temen la llegada del Big One, un terremoto de grado 8 con una gran capacidad destructiva.

Los expertos también mencionaron que la falla del Puente Hill es una amenaza inclusive superior a la falla de San Andrés. Se trata de una falla inversa, que son aquellas en donde uno de los bloques de la corteza terrestre se desplaza hacia arriba en relación con el otro, debido a fuerzas compresivas. Podría causar destrozos devastadores valuados en hasta US$252 mil millones, según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS, por sus siglas en inglés).

La actividad sísmica aumenta en California y preocupa a los especialistas

La Dra. Lucy Jones, geofísica e investigadora del Instituto de Tecnología de California (Caltech), aseguró que la actividad sísmica de 2024 es la más grande que se dio en el estado desde 1988. En los últimos 90 años, el sur de la región tuvo una media anual de entre diez y 12 terremotos de magnitud 4 o superior. No obstante, en las últimas dos décadas, esa cifra bajó a un promedio de cinco.

En diálogo con el medio KTLA 5, la especialista sostuvo que, al ser un año donde la actividad sísmica se mostró tan activa, no hay que esperar que el panorama cambie. “Por cada magnitud 7, hay diez de magnitud 6, 100 de magnitud cinco, 1000 de magnitud cuatro, etc. Por lo tanto, si la tasa de magnitud 4 aumenta, la probabilidad de que haya uno más grande aumentará aproximadamente en la misma cantidad. Parece que deberíamos esperar que esto continúe a un ritmo más alto”, advirtió.

Para la especialista, la llegada continua de estos terremotos solo es un indicativo de que arribarán más. Sobre la posibilidad de que se presente uno de grado 8 o superior, llamado Big One, la especialista indicó que tanto la población como la infraestructura de California se prepararon adecuadamente para poder sobrellevar un fenómeno de esa magnitud.

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