Nicolás Maduro expresó sus expectativas para las próximas elecciones regionales, estableciendo una meta ambiciosa para el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
Por lapatilla.com
Durante su intervención, Maduro afirmó que el oficialismo debe asegurarse la victoria en al menos 300 de las 335 alcaldías del país.
“Y por lo menos 300 alcaldías tenemos que ganar”, declaró Maduro, generando sorpresa y escepticismo en diversos sectores. Esta cifra, que representa casi el 90% de los municipios del país, se ve como una meta desproporcionada dada la situación actual de Venezuela, marcada por una profunda crisis económica, descontento social y un entorno electoral que ha sido cuestionado tanto a nivel nacional como internacional.