Daniel Maldini, jugador del Monza e hijo del mítico Paolo Maldini, excapitán y zaguero del Milan, aseguró este martes que nunca le ha pedido consejo a su padre sobre cómo regatear a los defensas.
Daniel es el tercer Maldini que entra en una lista de la selección italiana. Su buen trabajo con el Monza le ha servido para recibir la llamada de Luciano Spalletti, seleccionador, para los partidos de Liga de Naciones ante Bélgica (10 octubre) e Israel (14 de octubre).
Entró en la ‘Azzurra’ más de 22 años después de la última presencia de Paolo, su padre, un 18 de junio de 2002; y 61 años después de Cesare, su abuelo, que lo hizo por ultima vez en 1963.
“Nunca le he preguntado a mi padre cómo regatear a los defensas”, dijo en su primera rueda de prensa como internacional.
Su familia, siempre ligada al fútbol, no presiona a la tercera generación.
“Mi familia siempre ha estado cerca de mí, pero no hemos hablado mucho de esta convocatoria. Mi padre estaba contento, pero no me ha dicho nada en particular. Me hace sentir orgulloso ver las fotos de mi padre y mi abuelo aquí (Coverciano, ciudad deportiva de la Federación Italiana), pero vivo el día a día”, apuntó.
“Venezuela también me había contactado en el pasado para jugar (su madre es venezolana), pero siempre preferí esperar y tomar la decisión correcta. Creo que valió la pena”, añadió.
Con su padre y su abuelo, ambos defensas, solo comparte el apellido porque Daniel juega en todas las posiciones del ataque. El excanterano del Milan, presente en el año del ‘Scudetto’ de 2022, firmó este verano con el Monza, equipo en el que ha encontrado toda la continuidad que buscaba.
“Kaká era mi ídolo, me gustaba verle. Ahora Dybala es el jugador que más me ha impresionado en la Serie A, por los movimientos que hac”, comentó.
“En ataque todas las posiciones me vienen bien, quizá mediapunta mejor. Pero por izquierda, derecha o segunda punta no me cambia mucho”, sentenció.
Este viernes 11 de octubre, Daniel cumplirá 24 años: “Estar aquí con Italia es ya un regalo de cumpleaños”.
Su debut podría llegar justo el día de antes contra Bélgica en el Estadio Olímpico de Roma, o pocos días después en el Bluenergy Stadium de Údine ante Israel. EFE