Este fue el título de un artículo del 2015 de Graham Allison, profesor en Harvard: Thucidides Trap. En 2017 desarrolla su tesis en su libro “Con destino a la guerra“, se inspira en Tucídides, historiador griego del siglo V a. c., autor de “La Guerra del Peloponeso” que enfrentó a Esparta y Atenas e involucró a todo el mundo griego. Una guerra larga de 30 años por la hegemonía. En cierta manera pudiera decirse que no otra ha sido la historia de las guerras y conflictos, una lucha por el predominio. En conclusión, la tesis se inspira en Tucídides, pero se elabora y expresa en función de la realidad geo-política de la segunda mitad del siglo 20 como una teoría académica de la geo-política contemporánea, pero que en los Estados Unidos terminó influenciando la política exterior y la visión de la competencia global por el predominio, en particular en las últimas décadas y frente al surgimiento de China como potencia competidora. La peligrosidad de esta tesis es que ve la guerra global como inevitable, aunque sea en el mediano-largo plazo.
De acuerdo a la experiencia histórica, en todas las épocas y regiones existieron y existen conflictos por la hegemonía. El ejemplo clásico es Roma como imperio “universal”. El primero en referirlo fue el historiador Polibio. Otro ejemplo es el imperio español de Carlos V y Felipe II el imperio donde nunca se ponía el sol. Más cerca, la Inglaterra imperial del siglo 19, cuya marina tenía el control y predominio de todas las rutas globales comerciales, predominio que hereda y asume Estados Unidos desde 1945 hasta el día de hoy. El comercio global en un 80% usa vías marítimas y estas vías tienen pasos obligados que en su mayoría controla Estados Unidos y aliados. El estrecho de Malaca en Asia-el indo-pacifico- mar rojo-Canal de Suez-Mediterráneo-Gibraltar- Atlántico-Canal de Panamá es la ruta principal. Esta complejidad geo-política responde básicamente al control militar norteamericano. Pero la historia no es inmutable y los rivales o competidores de Estados Unidos buscan cambiar esta situación y es lo que está intentando China con sus llamadas rutas de la seda, que obliga a otro artículo.
En conclusión, lo peligroso de esta tesis de la “Trampa de Tucídides” es que convierte a la gran guerra como algo inevitable y de allí porqué algunos autores hablan de una tercera guerra mundial, aunque por ahora, sea a pedacitos y localizada, como está ocurriendo en Ucrania y Oriente Medio.