Las cortes de inmigración de EEUU están ante una cifra récord de casos de asilo sin resolver, siendo millones de migrantes los que esperan una decisión sobre sus peticiones. Los expertos aseguran que esto refleja los retos de falta de personal disponible para procesar los casos.
Unos 1.4 millones de casos de asilo están pendientes en las cortes de inmigración de Estados Unidos, según datos recientes revelados por el Departamento de Justicia. Este retraso representa un número récord de solicitudes sin resolver y, según los expertos, una muestra de la “saturación” actual del sistema migratorio estadounidense.
“Es claro que el sistema de inmigración en Estados Unidos necesita una reforma fundamental desde el principio a todos los componentes”, dijo a la Voz de América Ariel Ruiz Soto, analista del Instituto de Políticas Migratorias en Washington.
Ruiz Soto estima que “para poder agilizar el proceso de deportación de una persona se requiere no solamente detenerlos, pero también pasarlos por el proceso de una de un tribunal de inmigración. Y en este momento no existen ni los suficientes jueces para poder procesarlos de manera rápida, ni tampoco el número de suficientes de personas que pueden apoyar para hacer este tipo de procesos”.
El total de casos generales pendientes en las cortes de inmigración es de 3.558.995. Tan solo en el último año se recibieron más de 1,7 millones de ellos, y se completaron únicamente 701.749.
“Ese tipo de espera para estos casos es para personas que vienen de diferentes países en los cuales es más difícil poder deportarlos. Aún una persona que solicita asilo y no se la otorga, esa persona todavía tiene un derecho a apelar su caso y poder buscar si puede ser deportada a un país que corre peligro”, agregó el experto.
El año fiscal 2024 también vio un número récord de personas solicitando asilo defensivo. Este es el que se ve más seguido y consiste en que una persona que intenta cruzar ilegalmente al país es detenida por agentes de la Patrulla Fronteriza y durante el procesamiento para deportación alega que tiene miedo de regresar a su país. En total, 850.720 casos fueron presentados como defensivos.
Los casos de asilo afirmativo presentados este año alcanzaron los 11.918. El asilo afirmativo se trata de personas que hayan llegado al país con una visa o no hayan sido detectados por inmigración, y se presentan ante USCIS para pedir asilo.
Entre los casos de asilo pendientes por adjudicar, según los datos del Departamento de Justicia, hay unas 624.000 personas que no tienen representación legal.
“Representación legal para los migrantes y personas de cualquier tipo de situación de migración es extremadamente importante sea si es un proceso formativo o defensivo… Sabemos que la mayoría de las personas migrantes no tienen acceso o no saben cómo acceder a una representación legal, lo cual los hace víctimas en ciertos casos del sistema que usualmente está implementado para trabajar y procesar personas rápidamente”, agregó el analista.
Entre los casos de asilo que sí se decidieron durante el último año, más de 32 mil fueron aprobados y más de 38 mil, denegados.
Nueva administración busca declarar emergencia nacional
La próxima administración de Donald Trump se enfrentará al reto de los retrasos en el procesamiento de casos en las cortes de inmigración. El presidente electo, según los expertos, tendrá retos en su objetivo de emprender deportaciones masivas y aceleradas ante la falta de personas disponibles para hacerlo.
Trump confirmó el lunes que tiene un plan para declarar una emergencia nacional y usar recursos militares para las deportaciones masivas.
El republicano calificó de “cierta” una publicación en la red Truth Social de parte de Tom Fitton, presidente del grupo conservador Judicial Watch, donde se refería a unas “buenas noticias” sobre la administración entrante, que estaría “preparada para declarar la emergencia nacional, y usará recursos militares para revertir la invasión [de inmigrantes] bajo Biden, a través de un programa masivo de deportaciones”.
“Esto no significa que estas agencias de los militares, ni la Guardia Nacional, van a ser los que estén haciendo los arrestos o deteniendo a las personas, pero más bien van a apoyar el proceso de logística de aviones, personal de procesamiento, computadoras y construir diferentes de tipo de centros de detención”, explicó Ruiz Soto.
Durante su primer término, Trump apeló a una orden de emergencia nacional para asignar fondos del Pentágono a la construcción del muro fronterizo. Sin embargo, la administración del presidente Joe Biden terminó esa orden cuando tomó posesión en 2021.
Para los expertos, este tipo de declaraciones de emergencia “no le dan un poder ilimitado al presidente. En realidad lo que hacen es que le otorgan algunas autoridades específicas en cierto tiempo, que pueden ser contrarrestadas por el Congreso”.
Sin embargo, debido a que el Senado y la Cámara de Representantes estarán bajo control republicano cuando Trump tome posesión, “es muy poco probable” que intente limitar las autoridades de una emergencia nacional impuesta por Trump.
Trump ganó las elecciones presidenciales con su propuesta de deportaciones masivas al centro de su campaña. “El primer día lanzaré el mayor programa de deportación en la historia de Estados Unidos para sacar a los criminales”, dijo durante un evento de campaña en el Madison Square Garden de Nueva York en los últimos días de la contienda electoral.
Ruiz Soto, sin embargo, detalló que hacerlo “el primer día” de su mandato, “sería muy difícil”.
“Lo que se puede esperar más bien es que se empezará quizás con una revisión de los récords de personas que tienen ya órdenes de deportación que no la han cumplido, u otras personas que tienen algún antecedente criminal…va los cuales se les puede aplicar un tipo de deportación expedita”, apuntó.
Actualmente, unas 11,4 millones de personas están indocumentados en Estados Unidos, según datos del Censo.