Kansas pagará un millón de dólares para resolver una demanda por el asesinato de un niño de 7 años en 2015, alegando que la agencia de bienestar infantil del estado debería haberlo sacado de un hogar abusivo antes de que lo mataran de hambre y lo torturaran y su cuerpo fue dado de comer a los cerdos.
Por AP
La gobernadora Laura Kelly y los principales líderes de la Legislatura de Kansas aprobaron el acuerdo durante una breve reunión pública el martes después de consultar en privado con el principal adjunto del fiscal general del estado, Kris Kobach, durante 30 minutos. La demanda fue presentada en 2017 en el condado de Wyandotte, en el área de Kansas City, por la madre, la abuela materna y la hermana adulta del niño, y se programó un juicio en el tribunal de distrito para abril de 2025.
El niño, Adrian Jones, vivía con su padre, Michael Jones, y su madrastra, Heather Jones, en Kansas City, Kansas, cuando murió. Ambos están cumpliendo sentencias de prisión de 25 años a cadena perpetua por su asesinato, y las autoridades dijeron que el niño fue golpeado y encerrado desnudo en una ducha durante meses mientras una cámara de vigilancia de circuito cerrado registraba su deterioro.
El Departamento para Niños y Familias de Kansas recibió informes de que Adrian estaba siendo abusado varios años antes de su muerte, pero su último contacto físico con él fue casi cuatro años antes de su muerte, según más de 2.000 páginas de registros publicados en 2017 por la agencia. Los registros mostraron que los tres se movían con frecuencia entre comunidades de Kansas y Missouri.
“Este ha sido un largo viaje para la familia de Adrian”, dijo Matt Birch, abogado que representa a los miembros de la familia. “Lo más importante para la familia era, con suerte, hacer un cambio y hacer que esto fuera menos probable que sucediera en el futuro”.
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